Katu Arkornada sostuvo que la muerte de Chávez generó un punto de inflexión en la región|La etapa de transición al socialismo pasa por el capitalismo de Estado

Repensar los procesos en los que están imbuidos los Gobierno progresistas de América Latina es necesario para avanzar hacia una nueva escala de la democracia y del modelo económico. “No puedes desmontar por completo las instituciones heredadas, por lo que la transición a ese otro modelo solo puede pasar por un capitalismo de Estado que refuerce su poder en la economía. En el caso de Bolivia, pasó de un rol mínimo a 35% en la actualidad”, expresó Katu Arkonada, miembro de la Red de Intelectuales y Artistas en Defensa de la Humanidad.

En su criterio, no se trata de una etapa definitiva, como se pensaba en los modelos de sustitución de importaciones de la década de los 60 y 70, sino como un proceso de transición, hacia un horizonte que pasa por reforzar la economía comunitaria y otra serie de elementos.

“Hemos puesto en marcha procesos posneoliberales que dan cuenta de la vuelta del Estado para redistribuir la riqueza, pero no hemos entrado en procesos poscapitalistas. Ahora nos movemos en la dicotomía de la necesidad inmediata y marcar un horizonte más lejano, que en Bolivia lo hemos denominado socialismo comunitario. Pero digo, cada día tienes que alimentar a 10 millones de bolivianas y bolivianos”, sentenció.

Esta tensión es la que va a permitir, consideró el economista vasco, avances o no, con toda las dificultades que eso supone. “Venezuela es el país que mayores pasos ha dado, por eso toda la guerra mediática, política y económica que tiene que soportar el proceso bolivariano. No es casualidad que este país tenga las reservas petroleras más grandes del mundo”.

Al ser consultado sobre los modelos socialistas de los países nórdicos europeos que alcanzaron un alto desarrollo humano, económico y social sin tanto rollo, sin tanto entramado ideológico y con soluciones efectivas de largo plazo, con productividad y eficiencia para alcanzar el bienestar del pueblo, la respuesta de Arkonada fue tajante:

“Me parece que es un planteamiento trampa. Es decir, Europa occidental se pudo desarrollar y elevar su bienestar a costa de la explotación del Sur del mundo. De sus pueblos y de su naturaleza, de la extracción de recursos naturales, para ser más precisos. Las condiciones sobre las que parte esa región, y, en específico, los países nórdicos para construir una posible socialdemocracia, un Estado de bienestar, son muy diferentes a las de Bolivia o Venezuela. Fueron 500 años de colonialismo y luego 20 de neoliberalismo”, asestó.

En el caso de Venezuela, se vive lo que “Chávez llamaba la maldición del petróleo, es decir, países tan ricos en recursos naturales no se preocuparon por generar una diversificación productiva, por eso tienen que importar casi todo lo que se consume. Uno de los grandes retos es alcanzar la soberanía tecnológica”, planteó.

CRISIS EUROPEA

Fue categórico al afirmar que “los países nórdicos no deben ser referencia de nada. La socialdemocracia ya ha demostrado su fracaso. Lo están demostrando el Sur de Europa. De hecho el norte se libra porque está haciendo con aquella región (Sur) lo que antes hacía con América Latina”.

Preció que “la privatización de bienes comunes, como del agua, ajustes inclementes de la seguridad social, son cosas que parecían del siglo pasado y que se están haciendo hoy en la Europa mediterránea (PEIG: Portugal, España, Italia y Grecia)”.

Lo que sucede es que ahora no pueden con América del Sur, porque tiene Gobiernos que surcan procesos emancipadores, los del Norte lo están haciendo con Europa del Sur. “El capitalismo ha demostrado que para mantener su tasa de ganancia, necesita de la explotación”, sentenció.

Ratificó que las crisis en Europa se agravan en la medida que los procesos de cambio en Latinoamérica han venido recuperando la soberanía, y a la vez el norte de Europa ha venido construyendo su propio Sur, con mano de obra barata y privatizaciones que en algún momento el consenso de Washington trató de hacer en América Latina.

Las trasnacionales están ganado más dinero que nunca, aunque la izquierda se aferra a una discusión de la crisis terminal de capitalismo. Ante este comentario, Arkonada aprovechó para plantear las debilidades de la izquierda tradicional, que sin un proyecto político definido que enfrente a ese capitalismo depredador no tendrá un mayor impacto en la población.

“Las crisis son momentos muy complicados en los que se acentúa la lucha de clases, proceso reconocido por uno de los más grandes millonarios del mundo, Warren Buffett , cuando afirma: Por supuesto que hay lucha de clases y son los nuestros los que están ganando”, asestó.

Con base en esas lecturas, la izquierda tiene el reto de seguir en la lucha por la repartición de la renta y reducir las desigualdades. Esto implica cambiar el modelo extractivista, por otro de desarrollo que permita salir de la pobreza a la población y reivindicar los derechos de la madre tierra, como lo viene impulsado Evo Morales.

CONTEXTO PASADO Y ACTUAL

La disputa entre un proyecto emancipador y el de la restauración del pasado se ha acentuado, aseguró. De un lado está el núcleo duro del ALBA-TCP, que agrupa al primero, y del otro el neoliberalismo, cuyo bastión es la Alianza del Pacífico, planteó.

“Esta es una versión más sofisticada de lo que fue el ALCA (Alianza de Libre Comercio de las Américas), pero sin Estados Unidos y Canadá como cabezas visibles”, especificó y agregó que es importante analizar y ver esa disputa.

En los próximos meses habrá elecciones en muchos de los países del eje progresista, José “Pepe” Mujica ya no va y Cristina Kirchner tampoco, incluso, si gana el frente amplio con Tabaré Vásquez, no tengo duda que irá hacia el centro, aunque es pero si se pierden esos gobiernos. “Estamos en un momento que cuando teníamos las respuestas nos cambiaron las preguntas”, alertó.

“Ese cambio de época que definió Rafael Correa está viviendo también un punto de inflexión, que se ha ralentizado con la muerte de Hugo Chávez”, apuntó.

Además, mencionó la crisis global del capitalismo desde 2008, que perdura, y está envuelta en la reconfiguración y reordenamiento geopolítico del tránsito del mundo unipolar a otro multicéntrico y pluripolar del que habló el líder de la Revolución Bolivariana.

REPLANTAR EL DEBATE

El intelectual vasco no tiene pruritos en replantear la crisis de la izquierda, similar a la que se vivía cuando gana Chávez en 1998. Todo eso tiene un punto de inflexión alrededor de 2005, con la derrota del ALCA , los triunfos electorales de Evo Morales en Bolivia y de Rafael Correo en Ecuador, que se suman a las de Luiz Icnácio Lula Da Silva en Brasil, Tabaré Vázquez con el Frente Amplio en Uruguay y Héctor Kirchnner en Argentina.

La creación del ALBA (Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América) y el aporte del TCP (Tratado de Complementariedad de los Pueblos) de Evo Morales, forman parte además de este punto inflexión que ahora, se hace más visible con la muerto de Chávez, recalcó.

Por eso cree necesario en análisis profundo para este momento histórico, porque los gobiernos no tienen el tiempo necesario para reflexionar sobre esto, ocupados en responder a la coyuntura y a las agresiones internas y externa de que son objeto.

“Es el tiempo de reflexionar donde estamos y hacia dónde vamos, por lo que creo que la red de Intelectuales y Artistas en Defensa de la Humanidad tiene un rol importante, sin abandonar la defensa de los procesos de cambio en la región y el mundo”, apuntó.

Arkonada considera que la izquierda no tiene un proyecto alternativo global. Hay experiencias particulares, posteriores al neoliberal, como el de Venezuela y Bolivia, pero falta un proyecto que se acerque al socialismo, como contraposición al proyecto del capitalismo.

El intelectual vasco sostuvo que el proyecto progresista puede tener otro apellido, lo que debe estar claro, cuando se aborde una crítica, es que a excepción de Cuba, los gobiernos progresistas de la región no ha llegado al poder con una Revolución Armada que barriera con las instituciones, sino que se construyeron sobre la ruina de las anteriores.

Pero ratificó que si de algún sitio va a emerger una salida a la crisis es de América Latina, porque es la única región en donde se están generado procesos de cambio posneoliberales, y añade que “aún está por determinarse si se transformarán en pos capitalistas”.

Lo que sí ve claro es que América Latina se prefigura como el centro de la disputa geopolítica por dos motivos: por la evidente crisis del capitalismo, y hace un inciso al decir que aún no sabemos con exactitud como catalogar este hecho, porque como reflexiona el intelectual egipcio Samir Amin existe una gran diferencia entre “crisis del capitalismo y un capitalismo en crisis”.

EL CASO BOLIVIA

Bolivia, país donde reside, Arkonada dijo que está viviendo un proceso de redistribución de la riqueza como “nunca antes se dio”. Junto a esto se esta avanzando en un proceso de industrialización efectivo.

Esta situación le augura un apoyo a la candidatura de Evo Morales alrededor de 60% que es aproximadamente la tasa de aprobación de su Gobierno. “Es mi apuesta personal”, sostuvo el intelectual en referencia a las venideras elecciones en ese país que se realizarán el 12 de octubre.

Pero no todo es color de rosa, aseguró que esta prosperidad le va a generar nuevos problemas al Gobierno de Morales, una numerosa parte de la clase popular pasará a ser clase media que tendrá otras demandas. También están los actuales sectores medios que no le llegan la redistribución como se benefician las clases populares, como sucede en Venezuela.

Además la juventud tiene otros imaginarios, para ellos la distribución de la riqueza es algo normal. “Hay que recordar que las protestas en Brasil no nacen en el Nordeste, donde se ha hecho un gran esfuerzo redistributivo, sino en los centros urbanos de la clase media en Sao paulo y Río de Janeiro”, sostuvo.

Esta situación, en su criterio, plantea una serie de retos que estos procesos deben enfrentar y para los que hay que prepararse. Bolivia tiene una ventaja y es que Venezuela está siendo como el dique de contención de las agresiones externas.

“Es el país que ha avanzado más al socialismo con todos los problemas y matices que se pueden plantear. Eso permite que Bolivia esté en una situación más cómoda que le ha permitido mantener una estabilidad política y económica. Si Venezuela hubiera sucumbido, otra sería la historia en los países progresistas del Sur. Estoy seguro que surgirá un Capriles (Henrique) boliviano pronto”, argumento.

Por eso es importante una mayor articulación de los países progresistas, reflexionó y concluyó diciendo que en esta dirección le pareció importante la convocatoria que hizo el presidente Nicolás Maduro de un gran cónclave internacional para discutir esos temas.

MILITANTES DEL PROCESO BOLIVIANO

Katu Arkonada, de nacionalidad vasca, es licenciado en Ciencias Económicas, tiene un diplomado de políticas públicas, fue asesor del Viceministerio de Planificación Estratégica, de la Unidad Jurídica Especializada en Desarrollo Constitucional y de la Cancillería de Bolivia.

En la actualidad es militante en el proceso de cambio boliviano, y colaborador permanente en el Blog de Telesur, y en medios como Cambio, Le Monde Diplomatique, Época y el portal Rebelión y miembro de la Red de Intelectuales y Artistas en Defensa de la Humanidad.

T/ Manuel López
F/ Luis Franco

LAS EMPRESAS DEL ESTADO SON IMPRODUCTIVAS COMO SE PUEDE REPARTIR RIQUEZA CON EMPRESAS IMPRODUCTIVAS.
COMO SE PUEDE HABLAR DE SOCIALISMOS CON ELITES BUROCRATICAS QUE VIVEN MAS ALLA DE SUS INGRESOS Y CUENTAS CON FABULOSAS CUENTAS EN DOLARES.
LA SOCIEDAD DEBE GENERAR RIQUEZA PARA QUE EL ESTADO A TRAVES DE LOS IMPUESTOS PUEDA HACER JUSTICIAS CON LOS MAS POBRES.
CREO EN LOS JOVENES EMPRENDEDORES, CREO EN LAS EMPRESAS PRIVADAS QUE GENERAN CONOCIMIENTO Y TRANSFORMAS LA MATERIA PRIMA EN BIENES AL SERVICIOS DE LOS PUEBLOS
ESTATISMO ES LA DICTADURA DEL CAPITALISMO QUE MATA ECONOMICAMENTE A LOS EMPRESARIOS CRIOLLO PARA DAR PASO A LAS GRANDES TRANSNACIONALES QUE TERMINAN DEVORANDO LOS PUEBLOS

  • rogelio acosta................................................................................................................................................................................................................................................. dice:

    Muy conciso el hombre y muy claro en sus planteamientos. Me llama la atención la respuesta que da, con respecto al desarrollo de los países nórdicos. Y es cierto, la vieja Europa no tiene nada que enseñarle al nuevo continente, Me refiero a América Latina y el Caribe. Sin la explotación de nuestros recursos y de nuestros pueblos, no estuvieran donde están.

  • Excelente artículo, Agradecida¡ me dio una mejor visón del proceso político latinoamericano

  • Excelente la nota. Los gobiernos progresistas deben limitar el retiro de ganancias de las compañías trasnacionales y exigirles que reinviertan los beneficios (como mínimo el 30% de las ganancias) en el país donde ganaron. También, los países de gobiernos populares deben integrarse no solamente en términos económicos, sino, en lo cultural y político para fortalecer la unidad en la diversidad de los pueblos de la «Patria Grande» y que permita desarrollar tecnología de punta de manera conjunta, integración regional ferroviaria, energética y alimentaria, por la cual, los beneficios lleguen a los pueblos. La cooperación mutua tiene que ser el norte de los países del Sur.