El presidente de Bolivia, Evo Morales, aplaudió este viernes el apoyo del movimiento indígena y campesino durante los 10 años de su gestión y se comprometió en el financiamiento de nuevas obras en beneficio de la sociedad.
El mandatario hizo esta declaración durante la entrega de una represa en el municipio de Poroma, en el sureño departamento de Chiquisaca, donde su gobierno ha invertido un total de 866 millones de bolivianos en proyectos de agua potable y riego, lo que representa ocho veces el monto de lo invertido en 20 años de gobiernos neoliberales.
Destacó que mediante el programa «Bolivia cambia, Evo cumple», se desarrollan en todo el territorio boliviano más de ocho mil obras.
«Hoy día vamos a aprobar tres proyectos con el programa Bolivia cambia, Evo cumple, una unidad educativa en Kukuri, puente Palajla y otra unidad educativa Chijmuri», detalló.
Para Morales, los logros sociales en la última década en el país fueron posibles gracias a la labor conjunta de las organizaciones sociales y a la nacionalización de los recursos naturales en 2006.
La represa inaugurada en el municipio de Poroma beneficiará a 67 familias dedicadas a la agricultura y garantiza el riego de unas 115 hectáreas.
EN CONTEXTO
Evo Morales es el primer presidente indígena de la nación altiplánica y el único que más tiempo ha permanecido en su cargo, gracias a las políticas de transformación social y económica que ha implementado.
El dignatario ha abierto el espacio para la participación de las comunidades indígenas, movimientos sociales, campesinos y obreros de todas las partes del país en las decisiones políticas.