El expresidente uruguayo José «Pepe» Mujica rompió relaciones con su ex canciller y actual secretario General de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, por criticar el proceso electoral de Venezuela.
«Lamento el rumbo por el que enfilaste y lo sé irreversible, por eso ahora formalmente te digo adiós y me despido», indicó el senador oriental a través de una carta publicada por el semanario montevideano Búsqueda.
La crítica de Mujica se enmarca en los cuestionamientos que ya se escucharon al excanciller desde su espacio político, el Movimiento de Participación Popular (MPP), que curiosamente también integra Almagro.
El MPP expresó el sábado pasado que la reciente carta del titular de la OEA «no solo no ayuda al proceso electoral que vive la República Bolivariana de Venezuela sino que contribuye a deslegitimarlo y a dificultar la convivencia democrática en ese país».
Almagro también fue cuestionado por el Partido Comunista del Uruguay (PCU), otra de las influyentes organizaciones del gobernante Frente Amplio (FA). La carta «llama más la atención cuando no se ve el mismo celo, ni la misma contundencia, para cuestionar a Colombia, con miles de presos políticos, miles de dirigentes sindicales y campesinos asesinados, millones de desplazados, cinco millones de ellos refugiados en Venezuela y bases militares extranjeras en su territorio».
Habría que prestar atención también a México «con decenas de miles de muertos en los últimos años y el caso más emblemático es el de los 43 estudiantes».
Pero no todo fue críticas para Almagro en Uruguay. El actual ministro de Economía y ex vicepresidente de Mujica, Danilo Ástori, valoró los conceptos del funcionario internacional y lo calificó como «magnífica y muy equilibrada». El otro apoyo fue de la oposición política uruguaya.
El martes 10 se divulgó la carta de Almagro en la que lamentó que el rechazo de Venezuela a la presencia de una misión de observadores de la OEA, en las elecciones municipales de diciembre, se fundara en posicionamiento político y no en los argumentos que hacen a la justicia y a las garantías necesarias para el desarrollo de un proceso electoral.
La nota fue dirigida a Tibisay Lucena, presidenta del Consejo Nacional Electoral de Venezuela (CNE).