La empresa disfrazó los sobornos como donaciones oficiales al PMDB|Fiscalía brasileña acusa al jefe del Senado en caso Petrobras

La fiscalía de Brasil denunció al presidente del Senado, Renan Calheiros, por corrupción pasiva y lavado de dinero en el caso Petrobras.

Calheiros ha sido acusado este lunes a través de un comunicado de la fiscalía de Estado, junto al diputado Aníbal Gomes —también del partido en el Gobierno PMDB (Partido del Movimiento Democrático Brasileño)—, de cobrar 800.000 reales en sobornos (unos 242.000 dólares al cambio actual) a la empresa Serveng a cambio de apoyo político para obtuviera contratos con la petrolera estatal Petrobras.

La nota pública explica que la empresa de infraestructura pagó los sobornos disfrazándolos de donaciones oficiales al PMDB, cuando su destinatario final era en realidad Calheiros.

A cambio del dinero, Calheiros y Gomes «ofrecieron apoyo político para mantener a Paulo Roberto Costa en el cargo de director de Abastecimiento de Petrobras y éste tomó las medidas necesarias para que Serveng participase de licitaciones en la empresa pública», ha señalado la fiscalía.

Una vez publicada la denuncia, Calheiros ha emitido un comunicado de defensa, según el cual sus cuentas electorales “ya fueron aprobadas” y, por consiguiente, se siente tranquilo y está listo para aclarar tanto ese como otros puntos de la investigación abierta al respecto.

El líder de la Cámara Alta brasileña es objeto de otras investigaciones relacionadas con el caso Petrobras y se enfrenta además a un juicio por malversación de fondos públicos en otro caso. Por este último sumario, el Supremo Tribunal Federal (STF) dictó orden de suspensión temporal contra Calheiros.

La Corte Suprema aceptó recientemente una medida cautelar presentada por el partido de oposición REDE Sustentabilidades («Red sostenibilidad», en portugués), basada en el argumento de que una persona que enfrenta un proceso judicial, como Calheiros, no puede mantenerse en la línea de sucesión presidencial, debido al puesto que ostenta en el Senado.

Sin embargo, días después, el Senado brasileño secundó a su presidente, desoyendo así la orden judicial que ordenaba su suspensión cautelar. La acusación formal presentada este lunes por la fiscalía echa más leña al fuego en la trama de desvíos de dineros públicos que sacude el panorama político brasileño.

La enorme mancha del “Petrolao”, una red de sobornos y desvío de fondos públicos que se urdió en la estatal Petrobras en la última década, no ha dado respiro a la clase política. Entre ellos, al expresidente de la Cámara de Diputados y artífice del impeachment de Dilma Rousseff, Eduardo Cunha, o el mismísimo expresidente Luiz Inácio Lula da Silva, imputado por recibir sobornos de la contratista Odebrecht.

FyF/Hispantv