El periodista José Vicente Rangel aseguró que sectores de la Oposición venezolana estarían estarían contactando a militares activos a través de familiares u oficiales en situación de retiro para transmitir mensajes desestabilizadores y golpistas.
Durante su programa dominical «José Vicente Hoy», transmitido a través de la televisora privada Televen, Rangel aseveró que las intenciones de los grupos de ultraderecha es “relacionarse cívicamente con vista al funcionamiento de la próxima Asamblea Nacional (AN)”.
Reveló que a partir de los resultados de las elecciones parlamentarias del 26 de septiembre, los sectores opositores, con una visión triunfalista, han comenzado a trabajar el tema militar para contactar con los distintos componentes de esta fuerza.
“El motivo de esta acción es formular propuestas, insinuando opciones en caso de que se plantee una situación crítica en el país. Pretenden difundir en el seno de este organismo una campaña de descrédito contra los jefes militares, caracterizados por su lealtad al presidente Hugo Chávez y al orden constitucional”, afirmó.
A su juicio, este comportamiento constituye una «actitud antidemocrática pero además peligrosa, porque estimula las acciones golpistas y aventureras latentes en ese sector social y político; las mismas que llegaron a organizar el golpe de abril del 2002».
Advirtió el comunicador que la oposición extrema pretende generar un clima similar al de abril de 2002, y que de ser así, «se trataría de otra nueva estupidez, sobre todo ahora cuando haber trabajado en el plano cívico permitió a la oposición retornar a la Asamblea Nacional en posiciones decorosas”.
Rangel agregó que estos grupos han iniciado una campaña de descrédito contra el general retirado Roger Cordero Lara, diputado electo del Partido Socialista Unido de Venezuela a la Asamblea Nacional por el estado Guárico, la cual es financiada por un prófugo de la justicia venezolana, asilado actualmente en Estados Unidos.
Dijo que la misma pretende «desviar la investigación adelantada por los tribunales en el caso de las masacres de Cantaura y Yumare, cometidas en la cuarta República, en las que está involucrado el para entonces funcionario de la Disip ,Henry López Sisco, refugiado en Costa Rica”.