Diversos movimientos sociales y políticos de izquierda del mundo enviaron su apoyo al Gobierno Bolivariano ante los intentos de golpe de Estado promovidos por la derecha venezolana, con el respaldo financiero del Gobierno de Estados Unidos.
El pasado 12 de febrero, la ultraderecha venezolana pretendía ejecutar un golpe de Estado, que incluía acciones terroristas como el bombardeo de objetivos estratégicos en Caracas y un atentado contra el presidente Nicolás Maduro en un acto masivo, tras la publicación de un documento firmado por Leopoldo López, María Machado y Antonio Ledezma. Dicho plan fue descubierto y desmantelado por las autoridades venezolanas, logrando la detención de algunos de los implicados.
En este sentido, el sindicato sudafricano Unión Nacional de la Educación, Salud y Trabajadores Afines (Nehawu) manifestó apoyo a la Revolución Bolivariana y condenó el intento de los imperialistas estadounidenses y sus colaboradores por desestabilizar al país.
«Esta embestida descarada contra la Revolución Bolivariana merece la condena de todas las fuerzas progresistas de todo el mundo, y hacemos un llamado a los trabajadores de Venezuela para resistir los intentos de hacer fracasar su revolución», expresa el comunicado de Nehawu.
Asimismo, el texto indica que «este nivel de agresión por parte de la única superpotencia necesita no sólo ser condenado, sino que debe ser enfrentada por la clase obrera de todo el mundo. Hay una urgente necesidad de una solidaridad internacional de la clase obrera y la restauración de un movimiento obrero internacionalista para resistir esta ‘diplomacia cañonera».
Por su parte, el Instituto de Información y Negociación Comercial de África del Sur y Oriental (Seatini, por sus siglas en inglés), capítulo Kenia, expresó su solidaridad al Gobierno Bolivariano y el pueblo venezolano frente al intento de Golpe de Estado de la derecha con apoyo de los Estados Unidos.
«El intento de golpe de Estado es una manifestación clara de la desesperación de los lacayos imperialistas que siempre han intentado, sin éxito, revertir las ganancias de la Revolución Bolivariana», indica el texto enviado a la Cancillería venezolana.
Mientras que, el Movimiento Guevarista de Bolivia envió un comunicado a Venezuela que indica que la patria de Bolívar «tiene derecho a defenderse mediante acciones que considere legítimas y efectivas, frente a cada uno de los intentos golpistas de la burguesía venezolana, así como de la guerra económica y psicológica que el imperialismo promueve en su contra».
El texto señala que es inaceptable la intervención de un país u organismo internacional en los asuntos internos de Venezuela, al hacer referencia a los 65 pronunciamientos emitidos en lo que va a de año por el Gobierno norteamericano en contra de la nación suramericana.
«Pleno respaldo a la lucha del pueblo venezolano, que representa la lucha de los pobres de la tierra y, por tanto, la de los militantes de nuestra organización», añade el Movimiento Guevarista.
Asimismo, dirigentes del Movimiento Pequeños Agricultores de Brasil comentaron, a través de un comunicado, que las verdaderas intenciones de la derecha venezolana son las de «revertir los grandes avances alcanzados por parte del pueblo, y generar las condiciones para que el gran capital trasnacional y nacional se apropie de los grandes recursos económicos, y así imponer la hegemonía económica del neoliberalismo en Venezuela».
La misiva añade que desde este movimiento reconocen los avances políticos, económicos y sociales en Venezuela, representando «un logro para todos los pueblos latinoamericanos y el mundo, y muestras que el camino hacia la suprema felicidad social es el socialismo».