Desarme nuclear|Rusia denuncia que EE.UU. socava estabilidad estratégica global

El sistema antimisiles en Europa, con componentes estratégicos estadounidenses y la construcción de armamentos de alta precisión, ponen en dudas el progreso del proceso de desarme nuclear, aseveró el director del Departamento de no proliferación y control armamentista, Mijail Ulianov.

Con sus acciones, Estados Unidos socava la estabilidad estratégica global y el proceso de desarme nuclear internacional, afirmó hoy una fuente de la cancillería de Rusia.

Advirtió Ulianov durante una rueda de prensa que en tales condiciones la continuidad del desarme nuclear se torna problemática, al subrayar que Moscú se esfuerza por crear el ambiente necesario y es a Washington a quien debe dirigirse ese cuestionamiento.

Sobre la violación del Tratado de No Proliferación, el funcionario refirió el entrenamiento por Estados Unidos de pilotos de países aliados en el uso del arma atómica durante las llamadas misiones conjuntas nucleares.

Muchos de los miembros del Movimiento de Países No Alineados reconocen que Rusia de manera permanente plantea esa cuestión en los foros internacionales, al considerar tales acciones una franca violación de los compromisos, enfatizó el experto.

Ulianov alertó, de otro lado, que su país tenía derecho a desplegar el arma nuclear en cualquier parte del territorio de la Federación, incluida Crimea.

De principio nos asiste ese derecho aunque Kiev considera lo contrario, respondió a una pregunta acerca de un posible emplazamiento de armamentos estratégicos en la península, que se reunificó con Rusia en marzo de 2014, tras un referendo consultivo.

Moscú suspendió desde este miércoles su participación en la comisión consultiva del Tratado de Fuerzas Armadas Convencionales en Europa (FACE), cuya moratoria había sido decretada por el presidente Vladimir Putin en 2007 por los incumplimientos de la OTAN.

El representante ruso ante la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE), Andrei Kelin, catalogó esa decisión como un paso fundado, el cual ha sido entendido dentro de ese foro, señaló.

La mayoría de los Estados miembros lamentan esa medida, pero era razonable de nuestra parte pues hacía tiempo que el convenio no funcionaba ni proporcionaba utilidad, expuso Kelin.

El jefe de la delegación rusa en las negociaciones sobre seguridad militar y control de armamentos, Antón Mazur, aclaró que el paso no significaba que Rusia renunciaba al diálogo en la cuestión de las armas convencionales en Europa.

Suscrito en noviembre de 1990 entre la OTAN y el extinto Pacto de Varsovia, el FACE entró en vigor en 1992, cuando ya no existía el bloque de países socialistas y la alianza se ampliaba con la incorporación de ex países socialistas y repúblicas exsoviéticas del mar Báltico. La versión adaptada a las nuevas realidades fue ratificada en 1999 solo por Rusia, Belarús, Kazajstán y Ucrania.

Fuente/Prensa Latina
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