Rusia solicitó este jueves a Naciones Unidas la investigación del rol desempeñado por francotiradores en los disturbios que llevaron a la toma del poder por la fuerza en Ucrania.
A propósito de la presencia en Kiev del asistente del Secretario General de la ONU para los Derechos Humanos, Ivan Simonovic, el representante permanente ruso Vitaly Churkin dijo a periodistas, después de una reunión del Consejo de Seguridad, que esa sería una cuestión a indagar para entender el reciente golpe de Estado en el país europeo.
De acuerdo con el diplomático, francotiradores de la oposición dispararon desde edificios y asesinaron a manifestantes y policías, lo cual creó el escenario propicio para la escalada de violencia por grupos extremistas, hasta provocar la salida del presidente electo Víktor Yanukóvich.
Todas las evidencias sugieren tales conclusiones, dijo el embajador ruso, quien reiteró que Moscú no acepta la legitimidad dada por occidente al nuevo gobierno de Ucrania, designado tras el derrocamiento por la fuerza del mandatario escogido en las urnas.
Simonovic arribó este jueves a Kiev, donde se encuentran el subsecretario general de la ONU, Jan Eliasson, y el enviado Robert Serry.
Esperamos que pueda conversar con varias personas y evaluar la situación de los derechos humanos, señaló Churkin al concluir la cuarta sesión del Consejo dedicada a Ucrania en menos de una semana, la cual ratificó las marcadas diferencias entre Rusia y Estados Unidos y sus aliados europeos sobre la crisis.
Mientras Moscú calificó de ilegítimo al nuevo gobierno, Washington, Londres y París le reiteraron su apoyo.
Respecto al referendo convocado en la república autónoma de Crimea, el representante ruso manifestó que fue una decisión de las autoridades locales, pero sus homólogos de Estados Unidos, Samantha Power, y Reino Unido, Mark Lyall Grant, advirtieron que sus países lo rechazan y no reconocerán sus resultados.
La consulta prevista el 16 de marzo definirá o no la adhesión a Rusia de esa región, ubicada en la península de Crimea, sede de la Flota del Mar Negro del gigante euroasiático.
En relación a la manera de salir de la crisis, Churkin expresó a la prensa que debe buscarse en el acuerdo del 21 de febrero entre Yanukóvich y líderes opositores, quienes desconocieron el pacto apenas horas después de firmado.
Los cambios constitucionales, las elecciones presidenciales adelantadas, la formación de un verdadero gobierno de coalición y la consideración a las regiones pudieran ser parte de la solución, dijo.
El representante de Moscú pidió a Simonovic y Eliasson aprovechar su estancia en Ucrania para promover ese escenario.
Por su parte, los diplomáticos de Estados Unidos y Reino Unido defendieron una mediación internacional en la crisis, que parta del reconocimiento a las nuevas autoridades de Kiev y del respeto a sus decisiones, como la convocatoria a elecciones en mayo.