Fernando Núñez (PSUV) quedó como presidente de la Cámara municipal|Por decisión de un tribunal se escogió nueva directiva del Concejo valenciano

Los ediles de la MUD no asistieron a la sesión

Luego de la decisión del Tribunal Contencioso Administrativo de Carabobo de anular la junta directiva del Concejo de Valencia conformada en diciembre del año pasado -encabezada por el edil de Redes, Jaime Torres, y en la vicepresidencia al expulsado del PSUV, Orlando Tortolero-, ayer se llevó a cabo la sesión en la cual se juramentó como nuevo presidente a Fernando Núñez (PSUV), y como segunda a bordo a Amarilis Morales (Tupamaro). La decisión del órgano de justicia obedeció a irregularidades que se habrían cometido en el reglamento de debate.

Durante la votación de ayer no estuvieron ni Torres ni los concejales de la Mesa de la Unidad Democrática (MUD). El Partido Comunista de Venezuela (PCV) se abstuvo y la nueva fórmula contó con el voto de siete concejales (seis del PSUV y una de Tupamaro). Cabe destacar que el puesto de Tortolero lo asumió el suplente Reni Pizzani (PSUV).

A juicio de Fernando Núñez, la sesión de concretó con “mucho calor de pueblo, con la militancia bolivariana”, lo cual “fortalece políticamente a un municipio que ha sido arrasado por una alcaldía que está en manos de la MUD, con Miguel Cocchiola”.

Según su visión, esta junta tiene mucha amplitud, la cual “cuenta con el apoyo de los partidos de la alianza patriótica”, a pesar de que algunos “no estuvieron presentes, y también de algunas opiniones del PCV, pero en el fondo se trata de un solo equipo parlamentario”.

Los objetivos para este año, sostuvo Núñez, son “defender el proceso revolucionario, acompañar las políticas sociales y de protecciones al pueblo del presidente Nicolás Maduro, y por supuesto continuar con el extraordinario trabajo del gobernador Francisco Ameliach”, enumeró el activista de izquierda.

Otra labor es vigilar el cumplimiento de los mandatos del pueblo, es decir, supervisar que la alcaldía asuma sus responsabilidades en todas las materias, en especial la relacionada a la recolección de la basura, precisó.

“Valencia jamás había estado tan abandonada por una administración tan terrible como la actual”, reprochó el responsable de la Cámara municipal, “por lo que los revolucionarios continuarán sus políticas para rescatarla de la desidia”.

PCV CRITICÓ LA CONFORMACIÓN

Esta junta es derivada de una orden de los tribunales de la República, una decisión “que no nos explicamos desde el PCV; por eso salvamos nuestro voto, por la forma en que ciertos sectores que forman parte del PSUV utilizan el aparato jurídico para alcanzar objetivos políticos, lo cual deja un mal precedente en Valencia”, opinó Henry Alvarado, edil del gallo rojo.

Según Alvarado (quien había respaldado la directiva anulada), el método que debe prevalecer dentro de los componentes de la Revolución “es el diálogo y el debate en torno a cómo deben tomarse las decisiones en Concejo; esa es una crítica permanente”.

T/Luis Tovías Baciao
F/Concejo de Valencia