La presidenta brasileña, Dilma Rousseff, recibió este lunes en el Palacio de Planalto, al exmandatario francés Nicolas Sarkozy, con quien dialogó sobre asuntos bilaterales e internacionales.
Rousseff y Sarkozy analizaron la crisis económico-financiera en la Unión Europea, el conflicto en el Medio Oriente y la situación del G-20 (grupo integrado por las 19 mayores economías, más la Unión Europea), señaló una fuente de la secretaria de Prensa de la Presidencia.
El exjefe de Estado destacó el alcance de los vínculos entre Brasil y Francia en los últimos años y reiteró el apoyo a que esta nación obtenga un asiento permanente en el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
De 57 años de edad, el exgobernante se encuentra aquí invitado por un banco privado para hablar de la crisis en la eurozona y solicitó una audiencia con Rousseff.
A este encuentro asistieron además el canciller brasileño, Antonio Patriota; y otros colaboradores del Gobierno.
Sarkozy fue presidente de Francia entre 2007 y mayo de este año y perdió la reelección con el socialista François Hollande.