El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, ratificó este viernes su compromiso de seguir dialogando con todos los sectores del país, pese a los intentos de desestabilización por parte de sectores de la derecha.
«Seguiremos con algo vital de nuestra vida que es el diálogo, el diálogo social, el diálogo humano, escuchando en primer lugar a nuestro pueblo, es lo primero, el diálogo con todos los sectores empresariales para seguir trabajando por el desarrollo de las fuerzas productivas, el diálogo con todos los sectores políticos, con todos, de esa oposición democrática que respeta la Constitución (…), el diálogo con la verdadera sociedad civil que existe”, aseveró.
El mandatario aseguró que nada ni nadie los apartará del camino del diálogo y de la construcción de consensos, mientras aclaró que fue la oposición extremista la que ha «roto el Acuerdo de Barbados al estar involucrados en cinco conspiraciones».
Además, ratificó que continuarán dedicando su energía, mente y vida «todos los días a la gente de a pie, que vale todo y vale mil veces más que cualquiera de estos apellidos, cualquiera de estos extremistas».
El Ejecutivo venezolano también comentó que el plan verdadero del sector extremista de la oposición es la violencia y el asalto al poder.
«Son los mismos. Se ponen un nombre, Coordinadora Democrática; se ponen un nombre, Mesa de la Unidad Democrática, la manito, la última cola; se ponen un nombre, Plataforma de la Unidad de Venezuela, la PUV, son los mismos apellidos, que sencillamente son verdaderos mercenarios de intereses extranjeros imperialistas contra nuestro país, contra Venezuela (…) Siempre actúan con la doble cara, el plan verdadero por debajo: la violencia, el magnicidio, el golpe, el atentado, el asalto al poder», resaltó.
El jefe de Estado comentó algunas de las conspiraciones y atentados contra la paz que se han vivido en el país durante los últimos 20 años, como «la guerra económica en todas sus formas durante distintos años, la guerra política interna, la guerra psicológica, para llevar a la sociedad a un nivel de enfrentamiento, de esquizofrenia; a lo que ellos llaman en sus manuales de pelea de perros, siempre me pareció horrible ese concepto (…) utilizado para caotizar países».
«Seguiremos con algo vital de nuestra vida que es el diálogo, el diálogo social, el diálogo humano, escuchando en primer lugar a nuestro pueblo, es lo primero, el diálogo con todos los sectores empresariales para seguir trabajando por el desarrollo de las fuerzas productivas, el diálogo con todos los sectores políticos, con todos, de esa oposición democrática que respeta la Constitución (…), el diálogo con la verdadera sociedad civil que existe”, aseveró.
El mandatario aseguró que nada ni nadie los apartará del camino del diálogo y de la construcción de consensos, mientras aclaró que fue la oposición extremista la que ha «roto el Acuerdo de Barbados al estar involucrados en cinco conspiraciones».
Además, ratificó que continuarán dedicando su energía, mente y vida «todos los días a la gente de a pie, que vale todo y vale mil veces más que cualquiera de estos apellidos, cualquiera de estos extremistas».
El Ejecutivo venezolano también comentó que el plan verdadero del sector extremista de la oposición es la violencia y el asalto al poder.
«Son los mismos. Se ponen un nombre, Coordinadora Democrática; se ponen un nombre, Mesa de la Unidad Democrática, la manito, la última cola; se ponen un nombre, Plataforma de la Unidad de Venezuela, la PUV, son los mismos apellidos, que sencillamente son verdaderos mercenarios de intereses extranjeros imperialistas contra nuestro país, contra Venezuela (…) Siempre actúan con la doble cara, el plan verdadero por debajo: la violencia, el magnicidio, el golpe, el atentado, el asalto al poder», resaltó.
El jefe de Estado comentó algunas de las conspiraciones y atentados contra la paz que se han vivido en el país durante los últimos 20 años, como «la guerra económica en todas sus formas durante distintos años, la guerra política interna, la guerra psicológica, para llevar a la sociedad a un nivel de enfrentamiento, de esquizofrenia; a lo que ellos llaman en sus manuales de pelea de perros, siempre me pareció horrible ese concepto (…) utilizado para caotizar países».
T/CO con información de Telesur