Los motivos del lobo de Francisco de Asís|El presidente Maduro y la dimensión estética (Opinión)

En estos días en que estoy releyendo los escritos del presidente Hugo Chávez y, sobre todo, las transcripciones de sus discursos y conversaciones con el pueblo, me doy cuenta más que nunca de que el Comandante era un manantial inagotable de ideas y proyectos sobre variedad de temas. Lo comunicaba como reflexiones en voz alta y con frecuencia en forma de sugerencias e incluso de instrucciones y órdenes precisas.

Visto con la perspectiva de hoy produce una enorme satisfacción personal ver la infinidad de veces en que su visión fructificó en hechos tangibles. Pero también ocurre que, ay dolor, pareciera que en algunas ocasiones su palabra sobre un determinado asunto fue desoída y cayó como el grano de trigo (para usar una imagen evangélica) sobre tierra yerma.

¡Si uno pudiera darle la vuelta al tiempo!

Ahora tenemos al presidente Nicolás Maduro. Lo seguimos con atención y entre todos tratamos de que su palabra como líder también fructifique en los hechos de la vida cotidiana.

Pero a veces, debo confesarlo, temo que algunas de sus sugerencias e instrucciones se pierdan en el camino.

Por ejemplo, me gustó mucho hace algunas semanas oír al presidente Maduro pidiendo que se tome en cuenta la dimensión estética en el trabajo con las Bases de Misiones Socialistas.

¡La dimensión estética, qué importante!

Es la casa bonita, la Caracas bonita, la Venezuela bonita de que nos hablaba Chávez.

Mi imaginación retrocedió en el tiempo hasta la época en que daba clases en la Facultad de Arquitectura y conversábamos sobre los cuatro niveles de compresión estética en la sociedad humana.

El primer nivel, el del sentido consciente de la imagen del propio cuerpo: conlleva el cuidado por la presencia, los peinados, los adornos, los ropajes que llevamos.

El segundo nivel, el del ámbito de vida doméstica o de trabajo: la casa, la oficina, el taller, la preocupación por la dignidad del pequeño ambiente.

El tercer nivel de comprensión, el de los espacios públicos de la ciudad o de cualquier asentamiento humano, entendiéndolo como la gran casa comunal cuya imagen debe ser un reflejo del alma colectiva.

El cuarto nivel de compresión, el del ámbito de la naturaleza, los grandes espacios que nos cobijan, los territorios del planeta donde habitamos, el amplio mundo que nos alberga a todos y que debemos preservar.

¡Qué bueno que el Presidente lo ponga sobre la mesa! He ahí un tema para la reflexión y la acción. Ojalá que no caiga en el vacío.

farrucosesto@gmail.com

Si uno pudiera darle la vuelta al tiempo!
Farruco sin estetica No hay ETICA y la Dimension Etica del Cmdte y de Nicolas trasciende los Niveles basicos Nombrados en la opinion leida,pasa al Espiritu y de este a la Creacion del Nuevo SER del nino trascendente Estetico nacido por parto Nuevo
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