Los presidentes de Francia, François Hollande, y de Níger, Mahamadou Issoufou, señalaron este martes que la inestabilidad en Malí representa una amenaza para África y consideraron necesaria una respuesta regional para solucionarla.
Luego de un encuentro en el Palacio del Elíseo, ambos mandatarios ofrecieron una conferencia de prensa conjunta donde la situación en ese país del noroeste africano acaparó el centro de la atención.
En Malí militares protagonizaron en marzo pasado un golpe militar que rompió el orden constitucional y auspició la presencia de grupos armados en el norte de este territorio.
El presidente de Níger aseguró que ante la situación creada todas las opciones están sobre la mesa y no se descarta una intervención militar para resolver el problema, aunque -añadió- primero debe buscarse una solución negociada.
Por su parte, el mandatario francés declaró que apoyaría una propuesta de resolución presentada en el Consejo de Seguridad de la ONU por parte de la Comunidad Económica de Estados del África Occidental.
En abril último el Movimiento Nacional de Liberación de Azawad proclamó la separación de una franja septentrional de Malí, cuyas principales ciudades son Tombuctú, Gao y Kidal.
Otros grupos como Ansar Din y Al Qaeda también operan en esa región maliense.
Malí y Níger fueron antiguas colonias de Francia y lograron su independencia en 1960.