El proceso integrador caribeño enfrenta este viernes un serio desafío por las diferencias debido al tema del transporte, uno de los principales puntos de debate en la 34 cumbre de Comunidad del Caribe (Caricom).
Varios dirigentes del área abogan por impulsar la aerolínea LIAT, con sede en Antigua y Barbuda, que presenta problemas económicos y vuela con aviones antiguos, pero otros abogan por crear una nueva.
También hay criticas a los subsidios otorgados por las autoridades de Trinidad y Tobago a Caribbean Airlines, su compañía nacional.
Este tema es un problema que debe ser resuelto sin demora por su repercusión en el desarrollo del Caribe, afirmó días atrás el primer ministro de San Cristóbal y Nieves, Denzil Douglas.
Ese es uno de los principales asuntos en la agenda de la reunión, que abrió sus puertas el miércoles último, que también discutirá sobre la crisis económica que enfrenta la región y la ayuda a los discapacitados.
La víspera, diversas personalidades destacaron la importancia de la Caricom, al cumplirse el 40 aniversario de su fundación, mediante la firma del Tratado de Chaguaramas.
Necesitamos recuperar los principios que hace hoy 40 años inspiraron a los fundadores de la organización y luchen por una región «segura, viable y próspera», subrayó el secretario general de la Comunidad, Irwin LaRocque.
Manifestó que la organización permitió a los países caribeños una mayor integración económica y social, además de coordinar la política exterior.
Por su parte, la primera ministra de Trinidad y Tobago, Kamla Persad-Bissessar, señaló que aunque hay avancen sustanciales, aún queda mucho por hacer.
Llamó a los líderes reunidos a trabajar para lograr que la Caricom sea «una fuerza aún mayor dentro de la comunidad mundial».
En similar sentido se pronunció su homólogo de Barbados, Freundel Stuart, quien consideró la necesidad de «mirar hacia adentro y estudiar nuestras fortalezas y recursos».
Cualquier evaluación objetiva de la Caricom en los últimos 40 años tiene que admitir que la población caribeña, con independencia de que sea anglófona o francesa, española u holandesa, está ahora más unida que nunca, aseguró.