Nuevas protestas estallaron este sábado en la capital de la República Tunecina tras la ceremonia por los 40 días del asesinato del político izquierdista Chukry Belaid, muerto en un atentado el pasado seis de febrero.
Una multitud estimada en varios miles de personas se reunió en la céntrica avenida Habib Bourguiba, donde después del asesinato del Belaid, presidente del Partido de los Demócratas Patrióticos, estallaron protestas reprimidas por la policía.
Los manifestantes se sumaron a las personas que fueron al cementerio de Al Jellaz, en el centro de esta capital, y corearon consignas contra el mayoritario partido islamista Ennahda, del primer ministro Alí Larayedh, a cuyo presidente, Rachid Gannouchi, acusan de haber ordenado el atentado.
Venganza, Venganza; Gannouchi, asesino; el pueblo está convencido que Gannouchi mató a Belaid, fueron algunas de las consignas coreadas por los protestantes, entre los cuales se encontraba la viuda de Belaid.
Las protestas de hoy son el primer conflicto que enfrenta el flamante gabinete estructurado por Larayedh, formado por Ennada, el secular Congreso por la República y Attakatol, de izquierda, después que otras tres agrupaciones declinaron integrarse.