Se cuenta con un presupuesto de 9,1 millones de euros| Proyecto busca crear fármacos a partir del veneno de animales

Una iniciativa europea, llamada ‘Proyecto Venomics’ y compuesta por ocho socios privados y públicos, va a explorar y explotar el veneno de diferentes animales con el fin de desarrollar nuevos medicamentos para tratar diversas enfermedades que afectan a las personas.

Según los expertos, los venenos constituyen una de las fuentes «más prometedoras» para la creación de nuevos compuestos farmacológicos, debido a sus actividades funcionales, pequeño tamaño, baja inmunogenicidad y gran estabilidad.

Además, el desarrollo de estrategias y recursos tecnológicos de gran alcance, que facilitan su síntesis química o producción recombinante, ha multiplicado el ímpetu por estudiar este recurso.

Este interés queda aún más justificado si se tiene en cuenta que hay más de 170 mil animales venenosos y que el veneno animal incorpora una colección de más de 40 millones de compuestos, de los cuales sólo aproximadamente unos 5 mil son actualmente conocidos y han sido adecuadamente estudiados.

Por este motivo, los impulsores del proyecto pretenden conocer si las toxinas de animales pueden ofrecer nuevas posibilidades de curación; si todavía hay algunas desconocidas y sin identificar; si es posible conocer las posibilidades que ofrecen sin tener un conocimiento previo del veneno analizado y con una cantidad mínima del mismo; si las nuevas tecnologías de secuenciación pueden ayudar a identificar nuevas toxinas candidatas, y si los estudios con estos venenos se pueden hacer de una forma «más eficiente, rentable y rápida» de los que se han realizado hasta ahora.

Para llevar a cabo la iniciativa, en la que participan empresas de España, Bélgica, Dinamarca, Francia y Portugal, se cuenta con un presupuesto, adquirido a través de fondos europeos, de 9,1 millones de euros, de los cuales 6 millones son subvencionados a través del séptimo programa marco FP7 HEALTH, 2011-2015.

«Es el proyecto más grande hasta el momento en este campo en todo el mundo, explorando la capacidad de los venenos para generar fármacos a una escala que nunca antes se había producido, con más de 200 venenos investigados», ha explicado el coordinador general del proyecto, Nicolas Gilles.

Desde que comenzara la iniciativa, hace 30 meses, se han recogido 120 especies venenosas, de las cuales 90 han sido analizadas por medio de transcriptómica y 30 por proteómica. Asimismo, de los diez primeros venenos de los que se cuenta con una información completa, se han identificado un promedio de 200 secuencias de cada especie.

«Esperamos obtener un banco de 20 mil secuencias al final del proyecto, que representará la mayor base de datos de secuencia de la toxina que se haya construido hasta el momento. El último desarrollo técnico que se ha registrado en este proyecto es el inicio de la producción de las toxinas», ha apostillado Gilles.

El trabajo tendrá un impacto «importante» en la salud pública, ofreciendo tanto la posibilidad de desarrollar fármacos innovadores dirigidos a receptores diana, así como nuevas vías terapéuticas para una serie de necesidades médicas no cubiertas actuales.

Fuente y Foto/TeleSur