El presidente ruso, Vladimir Putin, advirtió este miércoles que la terrorista organización Estado Islámico deforma y compromete al Islam con sus postulados ideológicos, impropios de la naturaleza de esa religión universal.
Putin asistió este miércoles a la reapertura de la Mezquita Mayor de Moscú, la más grande de Europa, en compañía del líder palestino Mahmud Abbas, y de los presidentes de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, y Pakistán, Mamnoon Hussain.
Vemos qué ocurre en el Medio Oriente, donde los terroristas del auto denominado Estado Islámico comprometen a esa gran religión mundial, propagando el odio, asesinando a personas, incluidos clérigos y de forma salvaje destruyen los monumentos de la cultura universal, observó el mandatario.
Dijo Putin que la ideología del Estado Islámico se construye sobre la mentira en una abierta tergiversación del Islam, y llamó a combatir de manera aunada a ese enemigo común de la humanidad.
Advirtió asimismo que esa organización, prohibida en Rusia como terrorista, intenta reclutar adeptos en el país, pero reconoció los esfuerzos y la valentía de los líderes de la comunidad musulmana (unos 20 millones de personas) por contrarrestar la propaganda extremista.
Destacó en ese sentido el dignatario el papel de los muftíes en Rusia por consolidar la armonía y el consenso interétnico y confesional.
A la inauguración de la Mezquita Mayor de Moscú asistieron también el presidente del Consejo de los Muftíes Ravil Gainutdin, y los mandatarios de Chechenia, Daguestán, Ingushetia y Tatarstán; así como diputados de la Duma y otras personalidades políticas, sociales y religiosas.
La ceremonia antecedió a la celebración de la fiesta musulmana del Sacrificio del Cordero o Eid al Adha (Kurban Bairán, en ruso), mañana jueves.