El jefe del Ejecutivo español en funciones, Mariano Rajoy, advirtió este domingo al Gobierno de Cataluña de que defenderá la unidad de España «con firmeza y determinación» ante el desafío independentista de la región del noreste del país.
«El Gobierno (español) no dejará pasar ni una sola actuación en contra de la ley», dijo. «No me faltará firmeza y determinación para seguir defendiendo la unidad de España y la soberanía nacional», añadió.
La declaración institucional tuvo lugar poco después del discurso de investidura del nuevo jefe del Ejecutivo de Cataluña, Carles Puigdemont, quien se comprometió a impulsar un proceso separatista para desconectar la región del resto de España.
«El Estado funciona siempre y tiene la misma fortaleza siempre, con independencia de que el Gobierno (español) esté en funciones», advirtió Rajoy.
La investidura de Puigdemont como jefe del Gobierno de Cataluña pone en una encrucijada a España en un momento especialmente delicado, ya que el Ejecutivo del país está en funciones tras las elecciones generales del 20 de diciembre, en las que ninguna fuerza política obtuvo los votos necesarios para gobernar sin apoyos.
Rajoy recordó hoy que los planes del nuevo jefe del Ejecutivo catalán «carecen de legitimidad» al estar basados en una resolución aprobada por el Parlamento catalán y suspendida después por el Tribunal Constitucional.
«Fue anulada en todos sus efectos porque es contraria al principio democrático, a la Constitución española, al Estatuto de Cataluña y supone una clara violación del derecho de los españoles», apuntó.
Rajoy aseguró que las principales fuerzas políticas del país están de acuerdo en su postura.
«Me he puesto en contacto con los líderes del Partido Socialista (PSOE) y de Ciudadanos. Les he transmitdo que como presidente del Gobierno tengo el deber de velar por las leyes y los derechos, y voy a hacerlo», señaló.
Rajoy informó de que dio «instrucciones» para que se actúe contra «cualquier actuación» que puedan adoptarse por parte del Gobierno de Cataluña, su presidente, el Parlamento regional o cualquier institución, que vulnere el Estado de derecho.
«Los españoles pueden estar tranquilos. Ni se va a abrir un proceso constituyente al margen de la ley ni a crear estructuras de Estado ilegales», apuntó. «Voy a defender la democracia y su principal fundamento: la soberanía que reside en el pueblo español», agregó.