El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se comprometió este lunes en Alicante con la puesta en marcha del Corredor Mediterráneo, y afirmó que el «propósito» del Ejecutivo central es que esta infraestructura sea «una de las espinas dorsales de la economía española y europea».
Así lo destacó durante la inauguración del nuevo AVE Madrid-Alicante, en la última de las paradas que realizó la línea, en la estación de la ciudad, en un acto que ha presidido el Príncipe de Asturias, junto con el presidente de la Generalitat Valenciana, Alberto Fabra y la secretaria general del PP y presidenta de Castilla-la Mancha, María Dolores de Cospedal.
El presidente del Gobierno aseguró que la importancia de la puesta en servicio del tramo entre Alicante y Albacete de la nueva línea de AVE no sólo radica en la mejora de la conexión con el centro y norte de España, sino también en «el desarrollo de una apuesta estratégica como es el Corredor Mediterráneo».
Por ello, Rajoy aprovechó la inauguración de la línea y su presencia en Alicante para hacer una «apuesta» por el Corredor, al que calificó como una vía «clave» para el transporte de mercancías y viajeros, y «determinante» para «la competitividad de la economía española».
En este sentido, afirmó que esta infraestructura es «una prioridad» para España y, como tal, figura en la nueva propuesta de desarrollo de la Red Transeuropea de Transporte en España presentada ante la UE en el año 2012.
300 NUEVOS KILÓMETROS
Rajoy recordó que en este último año y medio se han puesto en marcha las conexiones ferroviarias entre Barcelona-Girona-Figueres, y Albacete-Alicante, «impulsando todos los trabajos necesarios para poder concluir, y en algunos casos iniciar, estas infraestructuras».
Con la puesta en servicio de esta línea, «son ya 300 nuevos kilómetros de Alta Velocidad en esta Legislatura», ha subrayado el presidente del Ejecutivo, al subrayar que «la red española de alta velocidad supera ya los 3.100 kilómetros».