Para el presidente de Bolivia, Evo Morales, el rally Dakar permitió a su país unirse más con el resto del mundo en torno a la fiesta del deporte.
El mandatario despidió este sábado desde Pulacayo, a 45 kilómetros de Uyuni, a los pilotos que participan en esta competencia considerada la más extensa del mundo con 336 kilómetros de recorrido.
«Quiero agradecer a los organizadores de la ASO (Amaury Sport Organisation ) por permitirnos estar nuevamente con el Dakar por Bolivia, pero también estoy impresionado con el pueblo boliviano, como comentaban algunos competidores, el cariño es impresionante», resaltó Morales en el punto de partida de la séptima etapa Utuni-Salta, que fija su rumbo hacia Argentina.
En la actividad, el mandatario boliviano despidió a los competidores levantando la tricolor y la wiphala, como se acostumbra hacer en estas competencias con las bandera a cuadros.
El pasado jueves, Morales expresó su deseo de que el Rally de Dakar continúe atravesando el país en sus próximas ediciones y además sumar más regiones.
«Si sigue el Dakar por América, qué bueno sería incorporar otros departamentos en los próximos años. No es tanto gestión de Evo, sino el cariño del pueblo. El pueblo se ha ganado el cariño de los corredores», afirmó el mandatario durante una rueda de prensa.