La estación de tren Nord, en Bruselas, restableció sus operaciones, una hora después de haber sido evacuada por una alerta de bomba en plena hora pico.
Los expertos que se desplazaron a la estación no encontraron explosivos y concluyeron que se trató de una falsa alarma, transmitida a través de una llamada telefónica anónima.
La evacuación y la interrupción del tráfico ferroviario a partir y con destino a la estación Nord, han causado importantes retrasos en los trenes.
Tras el alerta, decenas de oficiales de policía y militares, así como helicópteros, se han movilizado a la estación Nord.
El alerta ocurrió mientras altos representantes de 75 países se encuentran en Bruselas para una conferencia sobre Afganistán, entre ellos el secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, y el secretario general de Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon.
También se desarrolló horas después de que dos policías fueron agredidos por un hombre con un cuchillo durante un control en el barrio de Schaerbeek, en la capital, donde los autores de los atentados terroristas de París y de Bruselas mantenían al menos dos escondites.
El autor de la agresión fue detenido y los investigadores trabajan sobre la hipótesis de que se trató de un ataque terrorista.