La Oficina Nacional de Supervisión Disciplinaria de los Cuerpos Policiales realiza encuentros estadales con los organismos policiales en los que se inspeccionan tres áreas del sistema integral de policía: el servicio policial, la asistencia técnica y la revisión disciplinaria, indicó la directora del organismo, Mónica Granados.
También se da seguimiento a las acciones tomadas para regularizar la situación de funcionarios que presentan problemas disciplinarios en diversos cuerpos policiales del país.
En el caso de Yaracuy, 189 funcionarios que presentan antecedentes policiales, que están solicitados o que tienen registros policiales, deben normalizar su situación en los organismos donde laboran. La responsabilidad de la revisión y de las acciones a tomar recaen sobre las autoridades policiales a las que están subordinados.
Granados comentó que en el diagnóstico realizado a nivel nacional, se detectó como la práctica errada más recurrente cometida en los organismos policiales, la obstaculización en el cumplimiento de las sanciones disciplinarías sobre los funcionarios que hayan incurrido en irregularidades.
“Es una práctica que viene del modelo viejo y que se viene solucionando con la aplicación de los controles y medidas necesarias, entre las que destaca la implementación de los consejos disciplinarios”, refirió Granados.
Acotó que tales comités se instalan de manera exitosa en todo el país, con un alto índice de efectividad en la supervisión disciplinaria de los cuerpos policiales.
Los comités ciudadanos de control policial también se instalan para ayudar a la fiscalización y control policial desde las propias comunidades, lo cual redundará positivamente en la prestación de los servicios policiales.