Por Gino González|Recluta para el delito (Opinión)

A mediados de los 70 en los barrios un personaje bien vestido hacía amistad con los jóvenes. Invitaba a fumar y regalaba marihuana. La intención, enviciar para luego vender la droga. En la mercadotecnia capitalista eso es normal. Hoy día cuando hasta la “yerba” de aquel tiempo no pasa de ser una simple manzanilla entre tanta basura que en la actualidad envenena a la juventud, calcule usted.

Recurro a este ejemplo porque del mismo modo que una religión, un partido político o el vendedor de cualquier mercancía realiza campañas para ganar adeptos, también lo hace el delito y eso para nadie es un secreto. Más aún cuando la inseguridad se convierte en una eficaz herramienta política para a través del terror crear una matriz de opinión que conlleve a querer salir del gobierno porque “es incapaz de acabar con la inseguridad y tal”.

El paramilitarismo en nuestro país ya hasta se dio el tupé de controlar totalmente una zona: San Vicente en Aragua.

Esto no tiene nada de maravilloso ni de increíble. Qué le puede costar a un grupo de criminales ir reclutando jóvenes para convertirlos en delincuentes en una sociedad donde la cultura capitalista ya estableció su plataforma moral casi absoluta para ello. La vida de Pablo Escobar Gaviria acaso no fue una de las series noveladas más vista en este país. No es acaso Schwarzenegger el héroe de las mayorías de este tiempo. Películas donde “el bueno” mata a un gentío y luego feliz y sonriente besa a la novia como que si matar a otro es comer caramelos. Lo cierto es que no hemos sido efectivos en atender la espiritualidad del pueblo que somos. La alienación es lo que se consigue en todas partes. No hemos sido capaces ni siquiera de regar a mansalva por todo este país música y películas por todas partes. Libros, si bastantes, pero “pescao no le gana a cochino ni nadando” y libro no le gana a disco ni a película. Aquí hay que piratear y masificar buena música y buen cine. Qué hay de sobra.

Lo cierto es que nos están atacando por todas, pero devolverse es más lejos que seguir. Esta debería ser la conciencia nacional.

ginoesnu@hotmail.com