El 15 de octubre 18 millones de venezolanos tendrán oportunidad de escoger a los gobernadores de los 23 estados del país. El chavismo unificado en torno a la paz y la profundización de la Revolución, la derecha marcada por sus fraudes internos y recién vestidos de demócratas luego de invocar durante 120 días la violencia y la muerte
El próximo 15 de octubre, venezolanas y venezolanos concurren nuevamente a sus centros de votación para ratificar su compromiso con la paz. Luego de que la elección de la Asamblea Nacional Constituyente cerrara la puertas a la violencia opositora de los meses precedentes, nuevamente el sufragio se acerca para simbolizar los anhelos de la gran mayoría de la población.
Precisamente ese voto y esa voluntad de paz es una de las principales causas de la desesperación de Washington y sus súbditos para incrementar las amenazas contra nuestro país. Mientras el señor Trump se da la lija de pararse en la tribuna de oradores de la ONU para denominar a Venezuela como una dictadura, este pueblo se prepara para elegir a sus gobernadores. Con un sistema electoral transparente, con los candidatos de la oposición que corren a la Casa Blanca a decir que no hay democracia. ¿Extraña dictadura, cierto?
La patria y la antipatria. Hace unas pocas semanas la dirigencia de la derecha decía a voz en pecho que no querían elecciones, que su único objetivo era “sacar a Maduro”. Hoy se han tragado sus palabras, durante 120 días promovieron la violencia y la muerte como un macabro atajo para asaltar el gobierno, sin votos, a la fuerza. La MUD presentó candidaturas en los 23 estados del país, luego de un proceso que describe muy bien sus características políticas. Trampas, divisiones y denuncias marcaron su proceso de selección de abanderados.
UNIDAD DE LOS PATRIOTAS
El Gran Polo Patriótico presentó candidaturas unitarias en todas las entidades del país. Una propuesta central ofrece al pueblo venezolano: la paz y avanzar en la profundización de la Revolución Bolivariana. Más de 8 millones de personas ratificaron en las elecciones constituyentes que ese es el camino que prefieren para nuestra patria.
Un grupo de candidatos del chavismo va a la reelección, es el caso de estados como Apure, Táchira, Zulia, Yaracuy, Monagas, Delta Amacuro, Trujillo, Nueva Esparta y Vargas. En otras se han presentado candidatos con una trayectoria probada al servicio del pueblo. Son estos últimos casos los de Sucre, Bolívar, Guárico, Falcón, Mérida, Barinas, Portuguesa, Carabobo, Aragua, Cojedes. En Lara, Miranda y Amazonas, el chavismo presenta a Carmen Meléndez, Héctor Rodríguez y Miguel Rodríguez, respectivamente. En Anzoátegui, Aristóbulo Iztúriz se propone nuevamente para la gobernación, luego de haber obtenido el triunfo en 2012 y separarse para ejercer la Vicepresidencia Ejecutiva de la República.
En su programa Domingo con Maduro del pasado 17 de septiembre, el Mandatario Nacional dijo que los pronósticos para las elecciones del próximo 15 de octubre son auspiciosos para los abanderados del Gran Polo Patriótico. Señaló que los candidatos del chavismo obtendrían una “buena victoria” y convocó a “difundir la verdad y buscar todos los caminos, entre ellos las redes sociales, para defender el proyecto bolivariano de Hugo Chávez”.
EL SACO DE GATOS
Cuando tienes un jefe que te dirige a distancia o en cada visita que le haces, es normal que tu brújula sea errática, que no sepas qué decir en determinadas oportunidades o que las contradicciones entre el grupo al que perteneces sean permanentes. Es la historia de una oposición que se pierde cuando se sale de la cartilla dictada en Washington.
Desde principios de año se contradijeron públicamente en torno a la participación electoral, por allá por junio, el presidente del parlamento en desacato, Julio Borges, afirmó que no irían a elecciones, poquitas horas pasaron para que Henrique Capriles dijera lo contrario: “Tanto él como la unidad van a participar en cualquier elección que se encuentre dentro de la Constitución”.
Luego vino la Constituyente y los más extremistas no sabían qué hacer con sus discursos, mientras que los más pargmáticos guardaban sus disfraces de escudos, capuchas, molotovs y armas de fabricación casera (y algunas veces convencionales), para vestirse de candidatos. Entonces vino la primera división, María Corina Machado dijo que era “inconcebible que las fuerzas democráticas venezolanas puedan contemplar un proceso de elecciones regionales sin que salga la dictadura del poder. Aquí nadie debe privilegiar cargos o espacios”.
LAS PRIMARIAS DEL DESENGAÑO
Entre zancadillas y tumbos, los grupos de la derecha concurrieron a unas elecciones primarias el pasado 10 de septiembre. Sin auditorías del proceso, sin reglas caras y con el previo pago de un monto de 8 mil dólares (lo exigían en esa moneda) para la inscripción de cada precandidatura. La escasa asistencia de electores marcó el proceso. Resulta titánico conocer cifras certeras sobre la partipación, los votos que obtuvo cada candidato, los nulos, los sufragios en blanco. Algún secreto bien guardado entre una dirigencia que asocia comicios con piromanía. Recordemos que en dos oportunidades han ordenado incinerar sus cuadernos de votación en procesos internos.
Nos imaginamos que a muchos de los que fueron parte de los equipos de campaña de los precandidatos de la derecha también se les dificulta, y mucho, conocer los resultados de la votación. Por ejemplo, no fue hasta hace una semana cuando Juan José Caldera, del comando de Biaggio Pillieri en Yaracuy, se atrevió a afirmar: “No fue una contienda limpia, usaron todo tipo de artimañas y de trampas para imponer una voluntad (la de PJ) distinta a lo que el pueblo yaracuyano quiere. Por lo tanto esos que actuaron así son responsables de lo que suceda en el estado Yaracuy, y yo los hago responsables”.
Es que hasta una semana después de las internas no se conocía quiénes eran los candidatos de la MUD en varias entidades del país. En Amazonas, el actual gobernador Liborio Guarulla anunció que Julio Ygarza, el precandidato a quien él apoya, concurría a las elecciones del 15 de octubre por fuera de la coalición de derechas. Así describió lo ocurrido el señor Guarulla: “Durante la impugnación, no fueron considerados aspectos relevantes del reglamento de la MUD y que, de hecho, decidieron no sumar la actas con “cuatro votos contra uno. No hubo posibilidad de reclamo; fue una decisión meramente política”. Simón Calzadilla (dirigente de MPV, el partido de ambos mencionados anteriormente) acusó a la comisión electoral de la MUD por “secuestrar el derecho al voto” de 480 amazonenses.
En otros estados pareciera que se impuso el chantaje político y no los votos de sus seguidores. Por ejemplo, en el Zulia designaron como candidato a Juan Pablo Guanipa (de Primero Justicia), a pesar que según los resultados que ellos anunciaron la escogida por sus votantes era Evelyn Trejo de Rosales (Un Nuevo Tiempo).
El 14 de septiembre de este año el precandidato de Primero Justicia en Aragua, José Ramón Arias, expresó en su cuenta de Twitter: “Queremos un cambio porque Aragua está sumergida en la violencia, no podemos apoyar a un candidato que es cómplice de la intimidación”. ¿En la violencia se preguntarían muchos? ¡Si la violencia fue lo que promovieron antes de la Constituyente?. Bueno, el señor se refería a la presunta violencia ejercida por Ismael García para imponer a la fuerza lo que presuntamente no había obtenido con votos. ¿Eso no es lo que quiere hacer siempre la derecha en el país?”.
En Aragua, Primero Justicia insistió en que hubo fraude, pero retiró a su candidato. ¿Se puede confiar en esta gente? ¿Estos no son los mismos que permanentemente descalifican y agreden a las autoridades del Consejo Nacional Electoral? De primarias muy poco, de negociaciones poco transparentes, chantajes, traiciones y amenazas, de eso sí hubo mucho en el proceso de selección de las candidaturas de la derecha para las elecciones del próximo 15 de octubre.
DATOS DE INTERÉS
De acuerdo con la resolución 170912-266 del CNE, la campaña electoral se inicia a la 6:00 am del día 23 de septiembre (hoy) y culmina a la medianoche del día 12 de octubre.
En cada canal de televisión por señal abierta, nacional o regional, cada organización política tendrá hasta 3 minutos diarios (no acumulables) para difundir sus propagandas. En la televisión por suscripción, cada organización tendrá un total de 3 minutos, en cada uno de los canales incluidos en su grilla.
En cada emisora de radio, las organizaciones políticas tendrán hasta 4 minutos diarios (no acumulables). En los medios impresos nacionales, regionales y locales se permitirá la contratación de hasta una página diaria en aquellos que circulen en formato tabloide y de media página en aquellos que circulen en formato estándar.
La normativa permite a las organizaciones con fines políticos, a las candidatas y candidatos contratar la difusión de propaganda electoral mediante operadores de telecomunicaciones que ofrezcan la facilidad de mensajería de textos, hasta por tres (3) emisiones semanales, no acumulables.
El CNE ratifica que queda expresamente prohibida la contratación y difusión de propaganda electoral a través de las redes de telefonía fija y móvil, distinta a los mensajes de textos. De igual forma, se prohíbe la contratación, publicación y difusión de propaganda de contenido político y/o electoral por parte de personas distintas o no autorizadas, conforme a la ley y a la referida normativa.
En las elecciones del 15 de octubre podrán participar 18.094.065 electores, de acuerdo con el Registro Electoral (RE), correspondiente al 15 de julio de este año. Esta cifra incluye 17 millones 898.004 venezolanos residentes en las entidades y 196.061 extranjeros residentes en el país e inscritos en el Registro Electoral. Debemos recordar que en esta oportunidad no tendrán oportunidad de ejercer su votos aquellos electores residentes en el Distrito Capital, ya que en esta entidad no se escoge la figura de gobernador.
T/ Chevige González Marcó
F/ Archivo CO
Caracas