La XII Feria Internacional del Libro, capítulo Yaracuy, desarrolla desde el jueves hasta este sábado 22, en el museo Carmelo Fernández de San Felipe, jornadas que incluyen la exhibición y venta de textos y la realización de actividades culturales para niños, jóvenes y adultos.
El coordinador de la plataforma del Libro y la Lectura del Gabinete Ministerial de Cultura de Yaracuy, Jairo Brijaldo, informó que las áreas del museo se utilizan para mostrar los ejemplares ofertados, más de 6.500 textos, y para instalar una diversidad de actividades relacionadas con la Filven.
“Durante estos días tenemos el pabellón infantil, el mercado del trueque, presentación de libros, exposición artesanal y gastronómica, exposiciones artísticas, presentaciones musicales, teatro de calle, tertulias poéticas, enmarcadas dentro de la V Bienal de Poetas Venezolanas, y otras jornadas para todos los gustos”, detalló Brijaldo.
En las jornadas culturales participan colectivos de las bases de misiones, Movimiento de Teatro César Rengifo, Red de Bibliotecas Públicas, Misión Cultura, Corazón Llanero Infantil y agrupaciones comunales de los 14 municipios.
Fondos editoriales de los estado Cojedes, Lara, Portuguesa, Carabobo y Yaracuy, y editoriales públicas y privadas del resto del país, que en total integral 32 instituciones, ofrecen los 6.500 ejemplares que se exhiben y venden en esta Filven, capítulo Yaracuy.
Carlos Camacho, del municipio Arístides Bastidas, participó este viernes de la segunda jornada de la Feria Internacional del Libro y adquirió algunos ejemplares relacionados con la poesía y la literatura latinoamericana, que, comentó, disfrutará en la tranquilidad de su hogar.
“Estoy extasiado con todo lo que tienen en esta Filven, de verdad que no sabía qué escoger y a la final me llevé varios ejemplares, a precios que nunca hubiera creído de lo económico que están, y que disfrutaré en mi casa desde hoy mismo. De seguro tendré que regresar este sábado porque me quedé con las ganas de llevarme más libros”, subrayó Camacho.
Héctor Giménez, de 10 años de edad, participó en el Pabellón Infantil, donde jugó y disfrutó de actividades recreativas y de lectura.
«La pasé muy bien, leímos varios cuentos y los analizamos e interpretamos varios personajes de esos cuentos. No creí que leer fuera tan divertido, y de ahora en adelante no dejaré de hacerlo», puntualizó el niño.