El gobernador del estado Mérida, Alexis Ramírez, ratificó este lunes que el estado Mérida es territorio de paz y no cederá ante las pretensiones de reavivar la violencia por parte de sectores ultraderechistas, que buscan desestabilizar al país para acabar con el proceso revolucionario.
Durante una entrevista concedida al programa Zurda Konducta, que transmite Venezolana de Televisión (VTV), resaltó: «Vamos a garantizar la paz, Mérida es una zona de paz, allá no va a haber guarimba», al comentar que en días pasados la extrema derecha intento reavivar los hechos de violencia, llamados guarimbas, como lo hicieron en el primer semestre de 2014, dejando un saldo de varios muertos y cientos de heridos.
Comentó que los graffitis en tres iglesias de la ciudad de Mérida contra el Nuncio Apostólico, Aldo Giordano, y ataques con bombas molotov a otro de los templos, hechos ocurridos el viernes pasado, corresponden en realidad a grupos de derecha que quieren desacreditar a la Revolución en el estado.
Ramírez mencionó que no es casualidad la reciente visita al país de los expresidentes de derecha Sebastián Piñera (Chile), Felipe Calderón (México) y Andrés Pastrana (Colombia), así como la campaña mediática contra el presidente de la Asamblea Nacional (AN), Diosdado Cabello, y las nuevas sanciones por parte del Congreso de Estados Unidos a Venezuela, acciones que forman parte del plan ultraderechista para desestabilizar al país, «defendiendo a los sectores del poder y no al pueblo».
«Hay un golpe económico en marcha, esa es la gran verdad», dijo, al tiempo que comentó que la Revolución Bolivariana no esconde los problemas del país, sino que trabaja para resolverlos, sin embargo, la distribución de los productos está en manos del sector privado, que en su mayoría está detrás de la guerra económica.
El gobernador comentó que en Mérida, por ejemplo, hay una empresa empaquetadora de leche que envasaba este producto como si tuviera otros añadidos especiales que lo sacan de los alimentos regulados, a fin de venderlo más caro, y además se contrabandeaba hacia Colombia.
«Poco a poco vamos a ir resolviendo, el mensaje es que aquí hay un Gobierno, una revolución que está con el pueblo, siempre protegiendo a nuestro pueblo», subrayó.