La Revolución Bolivariana ha rescatado la concepción de democracia popular, uno de los principios por los que lucharon militantes de izquierda con el derrocamiento del dictador Marcos Pérez Jiménez, hace 60 años.
Así lo recordó el historiador Juan Romero, quien ratificó que continúan siendo esencial el debate sobre cómo se practicó la democracia en Venezuela a partir de la ruptura del 23 de enero de 1958.
«Este día debe ser para el debate de la idea de la democracia, para entenderla como un espectro de oportunidades para todos, sin distingo de clases, debe ser un gran día de memoria en términos del aprendizaje, de cómo se han manipulado los procesos históricos que hicieron posible que estemos hoy construyendo colectivamente con un sentido de insurgencia lo que mantenemos en revolución, una herencia que tiene que ver con el hecho de que la democracia no solo en Venezuela sino en América Latina es una acumulado de luchas históricas», puntualizó este martes en el programa Encendidos, de Venezolana de Televisión.
El especialista significó la importancia de luchar contra la invisibilización de la memoria que sectores de la derecha han tratado de implantar en la población así como la tergiversación de las realidades políticas y el ocultamiento de los hechos.
En sus reflexiones considera que a partir de 1958 comenzó una etapa de pseudodemocracia de gobiernos liberales con una concepción burguesa, y hasta machista, que invisibilizó al poder popular y a la par surgieron organizaciones políticas y un conjunto de actores con una concepción distinta a la elitesca.
De manera que consideró que igualmente es vital enaltecer el aporte de figuras emblemáticas que fueron el espíritu del 23 de enero, entre ellos el periodista y revolucionario Fabricio Ojeda, al frente de la Junta Patriótica conformada hace 60 años por el Partido Comunista de Venezuela (PCV), la Unión Republicana Democrática (URD) y los representantes de Acción Democrática.
«La primera voz que escucha el pueblo de Caracas es la de Fabricio llamando a la movilización y a la aplicación de esa junta y es así como se descubre toda su potencialidad», sostuvo Romero.
Hizo la salvedad de que desde el Centro Nacional de Historia, de la red de memoria y patrimonio, «y que somos parte al mismo tiempo de la red de intelectuales estamos haciendo un esfuerzo de la recuperación de la memoria histórica», remarcó.