Peter Slipper, presidente del Parlamento de Australia, renunció a su cargo tras las denuncias de acoso sexual y fraude, según medios de prensa locales.
El diario Sunshine Coast reveló recientemente que el funcionario, casado y de 62 años, se insinuó a un colaborador homosexual, cuyo nombre no se informó y sin abundar en otros detalles.
Slipper ha negado esa acusación y también la de emplear fondos estatales en la utilización de taxis y otras necesidades personales.
Actualmente se desempeñada como presidente del Parlamento de forma independiente, luego de renunciar en el 2008 al Partido Liberal australiano.