Al menos tres personas murieron en la norteña provincia afgana de Kunduz como consecuencia de la explosión de una bomba al paso de un vehículo que trasladaba boletas electorales, informaron este domingo fuentes policiales. Los fallecidos son dos funcionarios comiciales y un agente policial, declaró el portavoz provincial de la policía, Sarwar Hosaini.
Según la fuente, junto a la destrucción del medio de transporte se sufrió la pérdida de al menos ocho urnas repletas de papeletas, las cuales habían sido previamente contabilizadas por la Comisión Electoral Independiente.
Aunque ningún grupo reivindicó el atentado, diversas fuentes responsabilizaron a grupos talibanes por los ataques, luego de que en días recientes éstos amenazaron con boicotear las elecciones presidenciales celebradas la víspera.
En la jornada electoral de ayer, a la que concurrieron ocho candidatos presidenciales, perecieron por enfrentamientos unas 200 personas, indicó este domingo en un comunicado el Ministerio del Interior.