La mayoría republicana en la Cámara de Representantes de Estados Unidos propuso este lunes ahorrar 2,2 billones de dólares en una década para eludir el abismo fiscal, en un intento por destrabar las negociaciones sobre el tema.
En una carta enviada al mandatario estadounidense, Barack Obama, el presidente de ese órgano legislativo, John Boehner, y otros seis correligionarios explicaron que la reducción se alcanzaría mediante reformas impositivas, recortes en programas federales de salud como el Medicare y en gastos públicos.
Pero esa iniciativa no incluye el aumento de los gravámenes a los ciudadanos más ricos, que a juicio del jefe de Estado es la solución al precipicio fiscal y a sus funestas consecuencias.
En respuesta, la Casa Blanca rechazó la oferta republicana por considerar que «no responde a la exigencia de que haya un equilibrio» entre los ingresos y los gastos.
Según el director de Comunicaciones, Dan Pfeiffer, esa medida impondrá una mayor carga financiera para la clase media, mientras el sector más acaudalado vería una rebaja en las tasas impositivas.
Los republicanos plantearon la oferta tras rechazar la semana pasada una del Gobierno que incluía 1,6 billones de dólares en incrementos de impuestos, 50 mil millones en gastos para estimular la economía y recortes presupuestarios ascendentes a 400 mil millones.
El Ejecutivo demócrata también estaba dispuesto a recortar el gasto federal y reducir la deuda pública de Estados Unidos, ascendente a 16 billones de dólares, a cambio de subir los impuestos solo a quienes ingresen superiores a 250 mil dólares anuales.
Si fracasan las negociaciones y se concreta el fenómeno financiero entonces la nación norteña entraría nuevamente en recesión, la mayoría de los ciudadanos vería un alza de impuestos sin precedentes que rondaría los 500 mil millones de dólares y se dispararía a 9% la tasa de desempleo, actualmente en 7,9.