Los restos mortales del presidente polaco, Lech Kaczynski llegaron en la mañana de este domingo al aeropuerto de Varsovia (capital) donde lo esperaban miles de ciudadanos que le rindieron honores con banderas nacionales para darle el último adiós, a un día del accidente de avión en el que mandatario, su esposa y gran parte de su equipo de Gobierno fallecieron.
En el terminal se realizaron los actos de recepción con honores militares. Posteriormente el cortejo fúnebre partió al palacio presidencial en un recorrido que fue acompañado por miles de ciudadanos polacos.
El presidente de Polonia, Lech Kaczynski, murió en la madrugada de este sábado, junto a 97 personas, entre las que se encontraban su esposa, Maria Kaczynska, e integrantes de su equipo de Gobierno, cuando el avión que lo transportaba se estrelló en las inmediaciones del aeropuerto ruso de la ciudad de Smolensk, a 360 kilómetros al suroeste de Moscú.
Fuentes de la Fiscalía rusa informaron que el avión Tupolev 154 en el que viajaba Kaczynski, de 60 años, junto a una delegación polaca de alto rango, sufrió un violento choque, en medio de una densa niebla, después que el piloto rechazara la sugerencia de desviar el vuelo hasta Moscú o Minsk, la capital de Bielorrusia.
El cadáver del jefe del Estado de la nación europea fue reconocido en el mismo lugar de los hechos por su hermano gemelo y líder de la oposición conservadora, Jaroslaw Kaczynski. Fue éste quien también recibió el ataúd en Varsovia, junto a la hija de la pareja fallecida, Marta.
Su esposa , Maria Kaczynska, no pudo ser repatriada junto al mandatario polaco ya que sus restos permanecen junto al de otras 23 personas que aún no han sido identificadas, de acuerdo con lo informado por el embajador polaco en Rusia, Jerzy Bahr.
Los actos fúnebres realizados en el aeropuerto de Varsovia fueron presididos por el primer ministro polaco, Donald Tusk; el presidente del Parlamento y jefe del Estado en encargado, Bronislaw Komorowski, y el presidente del Parlamento Europeo, Jerzy Buzek.