«Michael (Schumacher) quería a ayudar a uno de sus compañeros que estaban esquiando con él, que había caído. Rodeó una gran piedra, se descontroló y se precipitó encima de otra». Así lo informó Sabine Kehm, vocera que acompañó durante toda su trayectoria profesional a la leyenda de la F1, quien brindó los primeros detalles de la investigación.
La misma Kehm también confirmó el lamentable episodio en el que un periodista intentó burlar la seguridad del Hospital Universitario de Grenoble disfrazado de sacerdote para visitar a «Schumi», que tiene un estricto control sobre su habitación.
Luego del parte médico negativo del lunes, los doctores diagnosticaron que continúa en estado crítico 24 horas después, pero hablaron de una evolución favorable.
Mientras tanto, su manager pidió a los medios de prensa que respetaran la privacidad de la familia a pesar del interés mundial que existe por su grave estado de salud. Schumacher se debate entre la vida y la muerte tras el grave accidente del domingo en los Alpes franceses.