El ex canciller ecuatoriano, Ricardo Patiño, denunció la noche de este jueves que la orden de privativa de libertad en su contra emitida por la Fiscalía de Ecuador, por el supuesto delito de instigación, responde a un acto de persecución política del gobierno de Lenín Moreno que no tiene cabida en el ámbito internacional.
Durante un video difundido por las redes sociales, Patiño afirmó que la medida de la Fiscalía es una respuesta a las acusaciones que desde la bancada de la Revolución Ciudadana y el mismo pueblo ecuatoriano han realizado sobre la vinculación de Moreno a casos de corrupción, así como a su círculo más cercano.
Precisó que, aunque la Fiscalía se haya pronunciado contra la corrupción, el delito del cual se le acusa es el de instigación. «La razón por la cual han dictado prisión preventiva en mi contra no la van a creer, la razón es una intervención mía en una reunión interna del movimiento político de la Revolución Ciudadana en octubre del año pasado (2018), en la que llamo a nuestra militancia a acompañar al pueblo ecuatoriano a las calles, a las carreteras y las instituciones públicas sin usar la violencia para rechazar la nefasta política gubernamental».
Precisó que la mala política gubernamental se ve reflejada en los despidos de decenas de miles trabajadores y trabajadoras, los planes para privatizar los bienes del Estado, el alza de los combustibles, desatención total a productores, ganaderos y pescadores al punto de estar llevándolos a la quiebra, la firma de acuerdos con el Fondo Monetario Internacional que asegura traerá más recesión y pobreza.
Patiño reconoció que en esa oportunidad llamó a los ecuatorianos y ecuatorianas a protestar de manera pacífica ante el incumplimiento de las ofertas hechas por Moreno durante su campaña.
Recordó que el vicepresidente de la República, Jorge Glas, está detenido ilegalmente por un supuesto delito de asociación para delinquir del que no han presentado ninguna prueba, mientras que al expresidente Rafael Correa se le dictó orden de detención en medio de un acto judicial lleno de inconsistencias, arbitrariedades e ilegalidad que dio paso a que la Interpol deseche la orden.