El gobierno ruso criticó este jueves la decisión de Estados Unidos de imponer nuevas sanciones en su contra, acción que calificó de inaceptable e ilegal.
En declaraciones a la prensa, la portavoz del Ministerio de Relaciones Exteriores de Rusia, María Zajárova, señaló que «con ese comportamiento Washington busca un mayor deterioro de las relaciones bilaterales, las cuales fueron reducidas casi a cero» por agresiones anteriores.
Asimismo, aseguró que Moscú no cederá ante las presiones de la Casa Blanca y analizará una respuesta a las sanciones estadounidenses.
No obstante, recordó que su nación no desea aumentar las tensiones ni complicar aún más la situación existente.
El gobierno de Donald Trump divulgó que nuevos castigos contra Rusia podrían entrar en vigor el 22 de agosto, por considerar que el país euroasiático es responsable de organizar un ataque químico contra el exagente de inteligencia Serguei Skripal y su hija Yulia.
En varias ocasiones, Moscú ha negado su implicación en ese hecho y denunciado la ausencia de pruebas concluyentes, la falta de explicaciones convincentes sobre varios aspectos del caso y la campaña mediática y política impulsada por Estados Unidos y el Reino Unido.
El portavoz del Kremlin, Dmitry Peskov, rechazó las acusaciones contra esta nación y consideró «absolutamente inaceptables las nuevas restricciones relacionadas con ese suceso».
«Desmentimos una vez más de manera categórica todas las declaraciones sobre cualquier tipo de implicación de Rusia. La postura de Washington está en contra de una atmósfera constructiva en el plano de los lazos bilaterales», señaló.