Mediador viajará a las ciudades de Benghazi y Trípoli|Rusia envía diplomático a Libia para mediar en conflicto interno

Dmitri Medvédev, presidente de Rusia

El presidente de Rusia, Dmitri Medvedev, confirmó este jueves que un enviado especial de Moscú viajará a las ciudades de Benghazi y Trípoli para intentar una mediación entre las partes.

La declaración del mandatario fue realizada desde Roma, luego de una reunión con el primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, y el vicepresidente de Estados Unidos, Joe Biden.

Los representantes debatieron durante el encuentro tripartito de la situación en Oriente Medio, los contactos con las nuevas autoridades egipcias y el ingreso de Rusia a la Organización Mundial de Comercio (OMC), informó la portavoz del Kremlin, Natalia Timakova.

La semana pasada, el primer ministro libio, Bagdadi al-Mahmudi, solicitó a Rusia que mediara para alcanzar un cese el fuego entre las tropas del Gobierno y los grupos separatistas armados del este del país norafricano.

En la jornada de ayer, Medvedev se comunicó telefónicamente con el presidente de Sudáfrica, Jacob Zuma, a quien le expresó la “la necesidad y disposición a establecer un diálogo con todas las fuerzas en Libia que tengan futuro político”.

Ambos líderes coincidieron en que una mediación coordinada de Rusia, Sudáfrica y la Unión Africana (UA) contribuirá a que el Estado libio vuelva pronto a la senda de la paz y el desarrollo.

Por su parte, el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguei Lavrov, cuestionó la ampliación del plazo de ataques de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (Otan) contra Libia.

El funcionario manifestó que “con la fuerza no podremos hacer nada”.

Los países de la Otan acordaron el miércoles pasado extender sus bombardeos contra Libia por 90 días más, continuando así con la posición agresiva contrapuesta a los principios del derecho internacional, que propugnan por la solución pacífica de las controversias y el respeto a la soberanía y derecho de autodeterminación de las naciones.

Durante esta jornada, las fuerzas de la OTAN bombardearon nuevamente los alrededores del complejo de Bab Al-Aziziyah, en Trípoli, residencia del líder libio Muamar Al Gaddafi.

Según reportes de prensa, la aviación lanzó doce bombas y fue destruida una iglesia.

El gobierno libio denunció que entre el 19 de marzo, cuando comenzaron los ataques, y el 26 de mayo, la alianza militar asesinó a 718 civiles mientras que 4.067 resultaron heridos.

Fuente/AVN, Ria Novosti
Texto/CO
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