El gobierno de Santa Lucía anunció su compromiso de unirse a los países con una estrategia para reducir las emisiones de carbono, alto contaminante de la atmósfera, confirmaron hoy fuentes oficiales.
Como parte de ese proyecto, comenzaremos la transición hacia la denominada economía verde, centrada en el impulso de fuentes limpias de generación, precisó el ministro de Desarrollo Sostenible y Energía, James Fletcher.
La transformación de los sistemas energéticos insulares hacia alternativas renovables es fundamental para la conservación medioambiental y el crecimiento económico en la región del Caribe, añadió.
En junio de 2012 la Cumbre de la Tierra en Brasil señaló 10 desafíos a los pequeños estados insulares, entre los cuales figura reducir la dependencia de combustibles fósiles y esa también resulta la meta ahora en Santa Lucía, señaló Fletcher.
Los primeras medidas incluyen incentivos comerciales y de inversión a las tecnologías renovables y la construcción de plantas de procesamiento de residuos sólidos y sistemas purificadores del agua.