El presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, dijo este martes que no intervendrá en caso del alcalde de Bogotá (capital), Gustavo Petro, quien fue destituido por el Procurador General de Colombia, Alejandro Ordoñez, el pasado lunes 9 de diciembre.
«No voy a tomar partido ni a favor ni en contra del alcalde ni del Procurador. Tomaré partido por institucionalidad», señaló Santos en su cuenta de Twitter.
Indicó que lo que le corresponde es acatar y obedecer lo que dice Constitución, la ley y preservar la institucionalidad. Además, precisó en una entrevista concedida a la emisora local W Radio, que no puede controvertir las decisiones de los órganos de control.
«No voy a tomar partido a favor de nadie. Los que quieren eso tacan burro (están perdidos). Yo tomo partido a favor de la institucionalidad. No voy a intervenir en nada», señaló.
Petro fue destituido por la Procuraduría días atrás, un órgano de control para los funcionarios en una decisión controvertida que llevó a la Fiscalía a anunciar el sábado una indagación para determinar si la sanción fue proporcional.
Al respecto, el Gobierno colombiano ha afirmado que el Presidente no tiene facultades frente a la decisión del procurador, Alejandro Ordóñez, mientras que otros funcionarios, como el fiscal general, Eduardo Montealegre, afirman que esta es una competencia del Presidente.
Este martes, el alcalde de Bogotá viajará a Washington (capital estadounidense) para reunirse con el secretario ejecutivo de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), organismo de la Organización de Estados Americanos ante el cual Petro ya había pedido medidas cautelares.
El pasado domingo, el presidente de Colombia, Juan Manuel Santos, afirmó que el alcalde destituido de Bogotá está en todo su derecho de acudir a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) a plantear una resolución justa a su inhabilitación política.