¡Se acabó la pesca destructora en Venezuela!

¡»Se acabó la pesca destructora en Venezuela, se acabó la pesca de arrastre!”. Con estas palabras cargadas de emoción, el 14 de marzo del año 2009, en su programa “Aló Presidente” número 327, el Gigante de América Hugo Chávez, decretaba la eliminación de la pesca industrial de arrastre en aguas venezolanas.

Chávez, un visionario de su época, aseguró que esta práctica ocasionaba un daño irreparable y destructor al fondo marino.

Durante su programa, explicó «que en esta práctica voraz, se captura una inmensa cantidad de peces que son desperdiciados, los peces mueren y son desechados al mar y sólo una pequeña parte de la captura salvaje es la que se utiliza».

Práctica corrosiva

El portal web oficial de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), describe la pesca de arrastre o rastropesca como la utilización de grandes redes de reducido tamaño, en forma de embudo aplastado, que son sumergidas a diferentes profundidades en el mar. Luego, éstas son tiradas por barcos que durante su recorrido recogen grandes cantidades de especies.

La incapacidad de discriminación de las redes, construidas con hilos de nylon de diferente grosor, constituye la principal característica negativa de esta práctica. La utilización de estos instrumentos acaba con la vida de otras especies que no son el objetivo de la faena, y que por su edad y condiciones no son aprovechables comercialmente.

Un estudio realizado a finales de la década de los 90, llevado a cabo en la región oriental de Venezuela, reflejó que del total recogido por las redes, tan sólo se aprovechaba el 33% de la captura; mientras que el 66% restante regresaba muerto a las aguas. Este hecho, para 1999 representó la cifra de 43.000 toneladas compuestas principalmente por peces muertos.

Especialistas en Biología Marina y Ecología explicaron que el daño a la biomasa marina producido por la pesca industrial de arrastre era indescriptible. Muchas de las especies arrastradas por las redes se encontraban en etapa juvenil, que no habían alcanzado la madurez suficiente para cumplir el ciclo evolutivo, y por ende, acarreaba la extinción de la especie.

Esto afectaba directamente a los pescadores y pescadoras artesanales de Venezuela, población amada, respetada y visibilizada por el Comandante Eterno Hugo Chávez.

FAO celebró la decisión del Gobierno Bolivariano de Hugo Chávez por la eliminación de esta práctica en el 2009. Gladys Urbaneja, para ese entonces embajadora de Venezuela ante el organismo internacional, puntualizó ante la FAO con sede en Roma, que con la entrada en vigor de la prohibición de la pesca de arrastre, “la pesquería artesanal, que suplía el 70% del pescado que consumen los venezolanos y que genera mayor número de empleos en las comunidades de pescadores del país, se recuperaría haciendo que en Venezuela se consolide la seguridad alimentaria”.

En el marco del 5to aniversario de la creación del Ministerio del Poder Popular de Pesca y Acuicultura (Minpesca), el ministro de Pesca y Acuicultura, Juan Luis Laya, celebró la decisión que tomara el comandante Hugo Chávez de eliminar de los mares venezolanos la pesca industrial de arrastre.

“Esa decisión del Comandante Chávez permitió que la fauna marina venezolana se recuperara y creciera, ya que esa práctica había arrasado y destruido nuestra biomasa”.

De igual forma, Laya aseguró que con esta medida tomada por el Gigante Chávez la producción pesquera aumentó considerablemente ya que las especies marinas pudieron alcanzar su madurez, cumplir con su ciclo evolutivo y reproducirse de forma normal.

Día del Pescador 

Un año después de que Hugo Chávez anunciara la eliminación de la pesca industrial de arrastre, decretó el 14 de marzo como Día del Pescador Artesanal en Venezuela, con el único objetivo de celebrar la faena de los miles de hombres y mujeres de la Patria que se dedican a esta actividad.

El comandante Chávez dejó en evidencia el amor que sentía por el pueblo pescador. Su compromiso con este sector se reflejaba en cada una de las políticas llevadas a cabo durante su gestión como jefe de Estado.

La prohibición de la pesca industrial de arrastre, el cambio de nombre de Inapesca a Instituto Socialista de la Pesca y la Acuicultura (Insopesca), y la creación del Frente Nacional de Pescadores, Pescadoras, Acuicultores y Acuicultoras «Simón Bolívar»; con la finalidad de apuntar y guiar las instituciones del Estado al modelo socialista, fueron algunas de las más acertadas decisiones del líder de la Revolución Bolivariana.

Hasta la fecha se tienen contabilizados 108.573 hombres y mujeres dedicados a la faena pesquera y acuícola en toda la nación. Éstos, organizados en 892 Consejos Presidenciales de Pescadores y Acuicultores (Conppa) trabajan de forma incansable para inundar de pescado a la Venezuela potencia.

Han pasado 12 años desde que Hugo Chávez empoderó a los que se dedican a esta actividad en el país. Como fiel defensor del medio ambiente, y desde los escenarios más amplios y diversos, fijó posturas firmes, positivas y a favor de los más vulnerables.

El gigante abogó por la necesidad de implementar e impulsar acciones inmediatas y contundentes que permitirían el equilibrio de la naturaleza pensando en la evolución del pueblo venezolano como una patria libre y soberana.

El ministro Juan Luis Laya, aseguró que desde su despacho continuarán trabajando en pro del fortalecimiento e impulso del sector pesquero y acuícola venezolano. Asimismo, garantizó que la pesca corrosiva y destructora de arrastre no volverá a las aguas venezolanas, garantizando el sustento pesquero de los hijos de la patria de Bolívar y Chávez.

T y F/Prensa Minpesca