El pasado año fueron 9.000|La seguridad en París crece por el fin de año con 11.000 efectivos

El dispositivo de seguridad aumenta por el fin de año en París, con 11.000 policías y militares desplegados en toda la región, frente a las 9.000 del pasado año, y un recorte del programa festivo para tratar de disminuir el riesgo en algunas de las concentraciones populares más difíciles de controlar.

Como es tradicional, el punto fuerte es la avenida de los Campos Elíseos y la zona circundante, donde van a desplegarse 1.600 policías que van a regular los flujos de entrada y de salida de personas, y harán de forma aleatoria registros y controles de identidad.

Se han anulado los fuegos artificiales y las proyecciones de vídeo en el Arco de Triunfo, que ya se hicieron el pasado año, se han limitado a diez minutos (con imágenes de la ciudad) y se proyectarán en seis pantallas gigantes distribuidas por toda la avenida para evitar que el público se concentre en el tramo más cercano al famoso monumento.

El tráfico en los Campos Elíseos -donde el pasado año se reunieron cerca de 650.000 personas- se cortará para permitir que los carriles habitualmente dedicados a los vehículos los ocupen los peatones que festejen la llegada de 2016, pero solo un par de horas en torno a la medianoche.

De los 11.000 efectivos movilizados en toda la región de Ile de France, habrá sobre todo policías y gendarmes, pero también 2.300 bomberos y 2.000 militares de la misión antiterrorista.

El portavoz del Ministerio del Interior, Pierre-Henry Brandet, reconoció hoy que se trata de «una movilización excepcional» por la amenaza terrorista», y recordó que más allá de la región de París, en el conjunto de Francia se ocuparán de la seguridad durante la noche «varias decenas de miles de hombres y mujeres», 60.000 según las cifras ofrecidas ayer por el Gobierno.

«La seguridad se tiene que asegurar en todas partes y en todo momento», destacó en una entrevista a la emisora France Info.

El prefecto de policía de París, Michel Cadot, había precisado ayer que aunque la amenaza terrorista «es permanente», «no hay elementos nuevos específicos» sobre la ciudad o sobre el área metropolitana que «justificarían medidas particulares».

En la zona de los Campos Elíseos se aplicarán además medidas habituales, como la de prohibir la venta de bebidas alcohólicas desde las 20.00 horas y llevar botellas de cristal, así como los petardos y materiales pirotécnicos.

Ayer, precisamente, se habían requisado tres toneladas de equipos pirotécnicos en un almacén de Aubervilliers, en la periferia norte de París, por saltarse las restricciones en el comercio de ese tipo de productos.

Los atentados de este año en París, y en particular los del 13 de noviembre, han reducido de forma significativa el número de turistas en la capital francesa -sobre todo japoneses y estadounidenses-, lo que se traduce, entre otras cosas, en un bajón de las reservas hoteleras en estas fiestas de fin de año del 30 %, de acuerdo con la patronal del sector, la Umih.

En la misma línea, se espera una menor afluencia en los restaurantes esta Nochevieja, que podría ser hasta un 50% inferior a la del pasado año.

Fuente y Foto/EFE