El Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB, antiguo KGB) aseguró que desarticuló a un grupo de agentes militares ucranianos que preparaban una serie de atentados en Crimea para desestabilizar la península.
De acuerdo al comunicado de prensa del servicio de inteligencia ruso, las acciones desestabilizadoras «fueron planeados por la Dirección General de Inteligencia del Ministerio de Defensa de Ucrania y tenían como objetivo infraestructuras vitales de la península» de Crimea.
El pasado 6 de agosto un grupo de soldados ucranianos fueron descubiertos cerca de la localidad de Armiánsk en la República de Crimea y se inició un tiroteo, en el cual falleció un efectivo del FSB.
El organismo precisa que en el lugar fueron descubiertos 20 dispositivos explosivos con una carga total de unos 40 kilógramos de TNT.
El FSB sostiene que los atentados «perseguían desestabilizar la situación sociopolítica durante el período de campaña y celebración de las elecciones federales y regionales», convocadas para el próximo 18 de septiembre.