Este 28 de febrero se cumplen 160 años de su muerte|Simón Rodríguez propuso formular leyes adecuadas a las condiciones económicas

Sobre Simón Rodríguez “se habla mucho en estos últimos tiempos pues su pensamiento, que abarca lo político, filosófico y pedagógico, sigue teniendo vigencia”, afirmó el profesor e investigador José de Jesús Cordero Ceballos, a propósito de los 161 años de la muerte del maestro de Bolívar.

Una prueba de la vigencia de su legado, señaló el docente, es que “en lo político, Rodríguez hizo planteamientos que son temas actuales, sobre todo para quienes como nosotros estamos viviendo un movimiento de tipo socialista”. En efecto, apuntó, “consideraba muy importante establecer las leyes según las condiciones económicas políticas y sociales de cada país, como lo que estamos haciendo hoy día con el socialismo del siglo XXI para desarrollar un Estado avanzado en atención a esas condiciones”.

LO PEDAGÓGICO

En el plano pedagógico, “Rodríguez diferenciaba muy claramente la instrucción de la educación: dos cosas completamente distintas. Se instruye cuando se enseña un oficio y se educa cuando se enseña a poner esos conocimientos al servicio de la colectividad”, comentó Cordero Ceballos.

En 1840 Rodríguez llegó a Latacunga, ubicada al pie del volcán Cotopaxi, contó el invetigador. Allí “hay un colegio llamado San Vicente León, uno de los mejores de Ecuador y cuyo dueño lo invitó a realizar un proyecto”.

“Rodríguez accedió y comenzo a a trabajar, pero le dijo al director, un doctor de apellido Quevedo: ‘Si usted quiere que el dinero que me pagará no se pierda, trate de comenzar la educación por los indios, los dueños de América, los que alimentan a la iglesia y a los ricos con su trabajo’”, continuó.

El profesor señaló que “se alarmó el doctor Quevedo, y también los grupos oligárquicos por ese juicio tan crítico y rompieron con Rodríguez”.

LA SOCIABILIDAD

“Algo muy importante es lo que Rodríguez llama incentivar el sentido de la sociabilidad, que para él consiste en que se forme en los niños la idea de ser útiles a la sociedad. Propone un desarrollo industrial que permita conservar la naturaleza y usar los recursos en función social sin desperdiciarlos o derrocharlos” subrayó Cordero Ceballos.

“Rodríguez se preocupó por la enseñanza del Quechua, el idioma de los originarios, para que fuera usado, aprendido y enriquecido. Hoy sabemos que eso es muy importante porque muchos idiomas indígenas se han perdido”, añadió.

IDEAS INNOVADORAS

En el mismo contexto del desencuentro con Quevedo, Rodríguez había hecho a la ciudad de Latacunga “una serie de sugerencias. Entre otras, una que lo convierte en el precursor de la creación de los peajes, al proponer el mantenimiento de los caminos y carreteras para la movilización en caballos y carretas, y que estas vías se pudieran conservar con recursos provenientes de sus usuarios”, explicó.

También hizo propuestas sobre cómo sembrar “la cultura de mantenimiento, para que la gente tuviera la idea de que es responsabilidad de quienes trabajan con herramientas y suministros del Estado, ser cuidadosos para conservar esos bienes” -precisó.

SUS RELACIONES CON BOLÍVAR

El profesor Cordero Ceballos contó que “el niño Simón Bolívar, perteneciente a una de las familias más adineradas de la provincia, huérfano, bajo tutela de un tío que no podía atenderle debidamente es admitido en la Escuela Pública de Caracas, donde Rodríguez ejerce como maestro”.

“Rodríguez lo acepta como su alumno preferido, por ser muy despierto, inteligente y de rápido entendimiento. Aplica en su educación parte de sus muchas lecturas sobre el tema, principalmente de El Emilio, de Rausseau, sin que se pueda pensar que pudiera inculcarle ideas revolucionarias, porque el educando tenía muy pocos años”, contó.

Mencionó el reencuentro con Bolívar en París: “Es cuando el contacto de Rodríguez con Bolívar, se manifiesta más fructífero. Su alumno era ya un hombre, un viudo, que estaba llevando una vida algo desordenada”.

Apuntó que Rodríguez “fue quienlo entusiasma a luchar por la independencia”. Esa fue la época cuando se produce el juramento de Bolívar en el Monte Sacro: “El joven caraqueño decide regresar a la Patria a cumplir el juramento y lo invita a estos cometidos, pero Rodríguez no era hombre de armas tomar, más bien era de los que dan trascendentales combates con la inteligencia y se queda en Europa”.

QUIÉN ERA RODRÍGUEZ

Cordero Ceballos afirmó que sobre Simón Rodríguez, nacido el 28 de octubre de 1769, y se desconoce quiénes fueron sus padres. Pero se sabe que “fue criado por la señora Rosalía Rodríguez, viuda dedicada a adoptar niños expósitos”.

“Frecuentaban su casa sacerdotes y maestros, entre ellos los fundadores de la primera Escuela Pública de Caracas, quienes en cierto modo pueden ser considerados los primeros maestros de Rodríguez, aunque él no asistió como alumno a ese establecimiento”, expuso.

El investigador identificó a sus mentores: “Don Manuel Domínguez Sarabia y Guillermo Pelgrón. Este último. teniendo Rodríguez unos 20 años de edad, observó sus talentos y lo recomendó ante el Cabildo para que fuera aceptado como maestro en dicha escuela. Luego de un examen fue aceptado”.

Detalló que Pelgrón descargó “muchas de las responsabilidades de la dirección de la escuela en Rodríguez, en vista de su cultura, cualidades intelectuales y morales y éste lo asume con gusto, pero imbuido por la lectura de autores europeos que planteaban cambios revolucionarios en la educción, elabora un documento contentivo de cinco observaciones a la educación que se impartía en la Escuela Pública de Caracas.

T/ Mercedes Aguilar
I/ Manuel Loayza