Este jueves|Siria adopta medidas de control para evitar flujo de armas fronterizo

El Gobierno de Siria ha adoptado una serie de medidas de control para evitar el tráfico de armas y el ingreso de terroristas desde el territorio libanés con el objetivo de frenar la violencia que persiste en el país árabe.

El corresponsal de teleSUR en Siria, Hisham Wannous informó este jueves que el Gobierno sirio ha «procedido a establecer puestos de vigilancia, levantar telones de arena, excavar sanjas en la línea fronteriza, así como despejar las zonas forestales y sembrar minas antipersonas en los lugares de fácil acceso para los armados sobre todo en las zonas del norte del Líbano».

En cuanto a las fronteras marítimas «se intensificaron las patrullas navales en las áreas territoriales de Siria, mientras en la coordillera cercana a Homs (oeste) el Gobierno encamina patrullas de vigilancia para evitar la infiltración de armados en grupos pequeños que entran a pie o utilizando a los animales como transporte», reportó Wannous.

En los pasos fronterizos oficiales «se realiza un chequeo riguroso a los carros procedentes del Líbano», señaló el periodista.

El Gobierno del presidente sirio, Bashar Al Assad, le ha pedido al Ejecutivo libanés medidas más estrictas en la zona fronteriza. La respuesta del Líbano fue «la de aprobar un plan para aumentar la presencia del Ejército en la frontera norte con Siria», informó Wannous.

De acuerdo con el periodista el talón de Aquiles del Gobierno sirio en su lucha contra los grupos insurgentes son las fronteras. Según el Gobierno, por ellas está entrando armamento para respaldar al Ejército Libre Sirio (ELS), el grupo de desertores que ahora se enfrentan a las Fuerzas Armadas regulares.

Damasco ha reiterado que es a través de países vecinos como Jordania, Turquía, el Líbano e Irak por donde están recibiendo armas los grupos opositores al Gobierno de Al Assad.

Consciente de ello, el Gobierno iraquí redobló sus esfuerzos en las zonas limítrofes para reducir el tráfico de armamento.

Según una agencia de noticia internacional, que una persona cruce de forma ilegal con armamento del Líbano a Siria cuesta unos mil dólares. Desde el comienzo de la crisis en marzo de 2011, las autoridades sirias han casi duplicado sus servicios de inteligencia, pero son caminos en el que el contrabando de armas no entiende de fronteras.

A pesar de todas estas medidas de control el Gobierno de Bashar Al Assad ha reconocido que es «imposible» controlar todos los pasos fronterizos, reportó Hisham Wannous.

Fuente/Telesur