Autoridades de Siria rechazaron las falsas fabricaciones de las noticias sobre la supuesta deserción de un funcionario por desacuerdos con el Gobierno, en medio de acciones policiales para contrarrestar actos desestabilizadores de la oposición.
Un vocero gubernamental descalificó este jueves el reporte del canal catarí Al Jazeera relativo al fiscal general de la provincia de Hama, Adnan Bakkour, quien fue secuestrado y presuntamente obligado a hacer declaraciones contra el presidente Bashar Al-Assad, reportó Prensa Latina.
El secuestro del magistrado sirio se produjo hace tres días en el pueblo de Krnaz, donde fue interceptado por siete personas que portaban fusiles y ametralladoras.
De acuerdo con la agencia de noticias Sana, las falsas confesiones reproducidas por la cadena televisiva fueron «mentiras sobre prácticas completamente falsas y fabricaciones urdidas por grupos terroristas armados» que raptaron al jurista.
Las autoridades sirias denunciaron que el referido medio noticioso «empezó a adoptar este estilo con el objetivo de socavar la soberanía de Siria y su pueblo».
Unido a los testimonios del chofer y un guardaespaldas del fiscal general de Hama, los medios estatales sirios también se apoyaron en declaraciones de familiares de un fallecido coronel del Ejército para desmentir que su muerte se debió a un castigo por su presunta deserción.
El canal Al-Arabiya informó que el coronel Mohammed Al-Sahou falleció baleado por soldados cuando intentaba desvincularse de las fuerzas gubernamentales, pero un primo y un hijo señalaron que el deceso se debió a «un ataque cardíaco y su cuerpo estaba intacto».