Miembros de la comunidad siria en Italia y grupos juveniles del Líbano se concentraron este sábado en la plaza Sabee Bahraat, en Damasco, para expresar su rechazo a la intervención extranjera en los asuntos internos de Siria y manifestar su apoyo al proceso de reformas que adelanta el Gobierno de Bashar Al Assad.
La agencia de noticias Sana reseñó que la actividad fue organizada por el grupo Lamet Shamel, con motivo del Día de los Mártires. Los presentes corearon consignas para celebrar la forma como el Gobierno sirio ha logrado “frustrar el complot fraguado contra la patria”.
Durante la actividad, los asistentes reiteraron su apego a la unidad nacional “para enfrentar a la conspiración urdida contra Siria, con el fin de socavar su resistencia y desestabilizar su seguridad”.
El director de Lamet Shamel, Yaroub Hassan, destacó que el evento “es un gesto de gratitud por la inmortalización de los mártires sirios, quienes sacrificaron su vida para proteger el territorio nacional de los planes colonialistas dirigidos contra la dignidad y la vigorosidad de Siria”.
Por su parte, el jeque Abdul Salam al-Herach, coordinador del Simposio de los Ulemas Musulmanes en Akkar y el norte del Líbano, afirmó que participó en la jornada para manifestar su apoyo al pueblo sirio en su rechazo al terrorismo.
“Los sacrificios de los abnegados mártires del Ejército Árabe Sirio y de las Fuerzas del Mantenimiento del Orden han aguado los planes de los conspiradores y resguardado a una Siria fortificada e inexpugnable”.
El pueblo sirio conmemorará este domingo seis de mayo el Día de los Mártires, enfrentado a acciones armadas de grupos apoyados desde el exterior y a una intensa campaña mediática que intenta justificar una intervención militar extranjera.
El 6 de mayo de cada año los sirios rinden honores a todos aquellos que han sacrificado sus vidas para liberar a la patria y defenderla de agresiones provenientes de quienes atentan contra la seguridad y estabilidad del país.
Según Sana, durante el Día de los Mártires se recuerda la condena a muerte por las autoridades otomanas de varios patrióticos sirios, el 6 de mayo de 1916. Ese día fueron ejecutados 14 patriotas en la plaza de Al-Burej, en Beirut, y siete en la plaza de Marjeh, en Damasco, que desde entonces ha sido llamada la Plaza de los Mártires.