Pável Rondón | Sobre la frontera necesaria (Opinión)

La Revolución Bolivariana es asediada desde sus inicios por el Gobierno de Estados Unidos y otras fuerzas reaccionarias del mundo. Por ello el presidente Hugo Chávez pautó lo internacional como una de las políticas principales del Estado venezolano.

De allí que el análisis y el trato con los vecinos debe hacerse con especial atención.

En ese sentido se cometen dos errores cuando se observa a Colombia; primero: en la crítica al uribismo, que es el factor internacional más integrado a las agresiones, se hipostatiza, se les confunde con toda Colombia, se habla entonces de “Colombia”, de “los colombianos”.

El otro error, en esa generalización, es no valorar a la izquierda colombiana que está ampliando sus campos de acción y de influencia política. Esa expansión y reaparición se da sobretodo en departamentos fronterizos con Venezuela.

Uno de los cinco senadores del Polo Democrático es un joven que dirigió el paro agrario en Catatumbo (2013), zona que limita con el norte del Táchira y suroeste del Zulia.

En todos los departamentos de frontera con Venezuela perdió el uribismo, salvo en Vichada que sacó 500 votos de ventaja. En Norte de Santander Óscar Iván Zuluaga perdió por 23 puntos. En La Guajira los uribistas fueron triplicados.

Debe estudiarse más el sistema político colombiano: admitir las diferencias en el bloque oligárquico Juan Manuel Santos vs Álvaro Uribe, decidir trato y acciones conjuntas con la izquierda colombiana mas con la de frontera.

También un plan político para reinterpretar la nueva Colombia que surgirá del posconflicto. Y sobre la frontera necesaria que debe construirse con un Plan de Desarrollo, político-social-cultural-ambiental-económico y de unión en el que estén empresarios de ambos lados, pero sobretodo con organizaciones productivas populares y sociales también de los dos lados.

T/ Pável Rondón