Este martes, la Comisión de Contraloría del Consejo Legislativo del Táchira (CLET) solicitó en plenaria la apertura de una investigación sobre el destino de un millón de bolívares que la Gobernación de la entidad utilizó para el pago de una bonificación a sus empleados en septiembre de 2011 y que, finalmente, no canceló por completo.
Luis Mendoza, presidente de la comisión, explicó que el gobernador del estado, Ceśar Pérez Vivas, militante de Copei, prometió a sus trabajadores el pago de 6 mil 413 bolívares, como bono del día del servidor público.
Sin embargo, la Dirección de Personal, instancia que está siendo investigada actualmente por el desfalco de 4,5 millones por nómina paralela, sólo depósito mil 400 bolívares en las cuentas de cada uno de los trabajadores, quienes además debieron firmar un recibo de pago con el monto total del bono.
«Sólo se depositó a los trabajadores mil 400, pero el bono prometido fue de 6 mil 413 bolívares. Es decir, faltan 5 mil 13, por lo que queda un remanente de más de un millón de bolívares», explicó Mendoza, quien agregó: «Estamos claros que ya cerró el ejercicio fiscal del 2011, y para la fecha, el dinero no fue depositado a las cuentas».
Mendoza señaló que fueron los propios trabajadores quienes suministraron las pruebas, como recibos de pago y registros del depósito en sus libretas de ahorro, para que se aclare y se verifique el destino del dinero.
Agregó que se solicitará a la Gobernación de Táchira las nóminas de los trabajadores, así como la resolución de pago del bono por servidor público y el archivo de transferencia del dinero a la entidad bancaria en la cual se cancela el sueldo a los empleados. De esta forma, recopilarán información que sustentará la denuncia que presentarán al Ministerio Público.