El aumento de inmigrantes en Europa es un tema que se ha convertido en una verdadera crisis humanitaria, que a pesar de no ser nueva, ha ido aumentado significativamente en lo que va de 2015, tanto así que ha hecho tambalear la situación económica y social de muchos países que ahora ven con preocupación esta realidad.
Según cifras ofrecidas por la Agencia de Refugiados de las Naciones Unidas (ACNUR), 350.000 personas han cruzado el Mar Mediterráneo desde principios de año, y de ellos 107.000 solo en julio.
Asimismo, durante 2015 han muerto más de 2.500 ciudadanos en su intento de buscar un mejor futuro.
La Unión Europea ha planteado acoger alrededor de 120 mil refugiados y repartirlos entre los 27 países que conforman el bloque, según la propuesta planteada por su presidente Jean-Claude Juncker. La premier alemana, Ángela Merkel, advirtió que la medida es sólo «un primer paso» debido a la variabilidad en el número de refugiados.
¿REPARTIR A LOS INMIGRANTES ES LA SOLUCIÓN?
Para el internacionalista Rajihv Morillo, entrevistado por El Correo del Orinoco, estos problemas migratorios han venido creciendo principalmente luego de la llamada Primavera Árabe y la guerra civil en Libia y Siria, aunados a la situación económica, social y política desencadenada por estos eventos históricos.
Indicó que la causa de fondo de la migración es la pobreza y la falta de oportunidades en dichos países, lo cual, a su juicio, no se resolverá con “repartirse” a los ciudadanos.
“La solución no es que reciban a los inmigrantes y se lo repartan entre los países europeos, no es eso, la cuestión es que atiendan el drama que hay en Siria, en muchos países africanos, la pobreza, golpe de Estado, crisis económica”, expresó.
Morillo acotó que Europa es en gran medida responsable de la actual situación y tiene el compromiso “histórico y moral” de ayudar a estos pueblos.
“Históricamente ellos son responsables de esta situación, fueron los que colonizaron esos países y en vez de dejar cosas buenas dejaron las malas, en la mayoría de los casos”, aseguró.
Sugiere que una posible solución a esta situación es invertir en educación, salud, tecnología, viviendas y realizar una profunda cooperación económica y técnica, que los ayude a surgir, mediante proyectos concretos que se ejecuten a mediano y largo plazo.
Asimismo, se refirió a la polémica que desató a nivel mundial el hallazgo del cuerpo sin vida del niño sirio, Aylan Kurdi, de tres años, en las costas del mar Mediterráneo, lo cual conmocionó a la opinión pública, a pesar de ser un evento lamentablemente común entre los inmigrantes.
“Definitivamente el caso del niño sirio ha conmocionado al mundo y es posible que se aceleren las medidas en torno al tema migratorio”, advirtió.
La foto del niño, que muchos rechazan por ser dura y que otros aplauden por ser una muestra fehaciente de la cruda realidad que se viven en algunos países y que debe ser conocida por todos en su máxima expresión, fue tomada por Nilufer Demir, quien no dudó en plasmarla, ya que a su juicio, “era lo único que podía hacer para que el mundo escuchara su grito» (el de Kurdi).
Sin duda alguna, estas imágenes son necesarias para acelerar la conciencia y las acciones de los países del mundo para que se aboquen a brindar ayuda al éxodo masivo de inmigrantes que se ha convertido en una verdadera crisis humanitaria, sin obviar los difíciles retos políticos y económicos que esta situación presenta.
APOYO LATINOAMERICANO
Los países latinoamericanos también se han unido a la voz de asilo ante esta situación y han mostrado su solidaridad, siendo esto no un tema nuevo porque ya con anterioridad países como Brasil, Uruguay, Argentina y Venezuela habían acogido en su suelo a varios inmigrantes, en su mayoría sirios y palestinos.
El papa Francisco también elevó sus plegarias ante esta crisis migratoria y en su alocusión dominical informó que El Vaticano albergará a dos familias de refugiados que están “huyendo de la muerte” causada por la guerra o el hambre y exhortó a las parroquias, conventos y monasterios católicos de toda Europa a hacer lo mismo.
