Si miramos los avances de Sudáfrica en términos de libertad, política, valores y cultura en los últimos 20 años, podemos decir hoy que hemos ido muy lejos, afirmó la activista social Fátima Swartz.
Diligente y rápida en sus respuestas, Swartz concedió una entrevista a Prensa Latina en esta ciudad (distante unos mil 300 kilómetros al suroeste de Pretoria).
Vamos a hablar de «este país maravilloso», dijo, el cual necesita fortalecer lo ya alcanzado tras la derrota del apartheid.
Consideró que el paso del anterior régimen segregacionista al periodo de democracia es un proceso complejo y a veces cuesta un poco a la gente valorar las transformaciones que está viviendo Sudáfrica.
La mayoría de las personas saben que el ANC (Congreso Nacional Africano) es la opción para el país, si quieren una vida mejor, subrayó Swartz.
Recordó que en las elecciones del pasado año este partido (en el gobierno desde 1994) obtuvo el 62 por ciento de los votos, un hecho que demuestra el apoyo de la población.
Al referirse a los partidos de oposición que están en el escenario político y cómo tratan de impulsar su agenda piensa que no alcanzarán sus objetivos, pero no se pueden subestimar.
Actualmente -enfatizó- ninguno de esos partidos pondría en peligro la posición del ANC, el único que puede mostrar con claridad política el camino a seguir
Sin dudas, hay fuerzas externas e internas que están confluyendo para evitar el éxito del gobierno del ANC, advirtió.
Más adelante comentó sobre la «importancia de las elecciones municipales del próximo año», las que en su criterio «asegurarán el futuro de los comicios a nivel nacional en 2019».
Acerca del creciente debate respecto a que un día haya en Sudáfrica una mujer presidenta, Fátima expresó: «tenemos esperanza», aunque no cree que ahora mismo las condiciones estén dadas para que ello ocurra.
Para no pocos analistas el gobernante Congreso Nacional Africano se mantendrá en el poder en las elecciones que se anuncian a la vuelta de cuatro años.
Amante de su tierra, de su historia, Fátima Swartz es además una incondicional amiga de Cuba.