La ola de criminalidad que vive Honduras dejó el viernes un saldo de 15 muertos en el norte del país, informó este sábado la Policía Nacional.
De acuerdo con el comisario Juan López, los crímenes ocurrieron durante dos hechos aislados en el departamento de San Pedro Sula, segunda ciudad más importante de la nación centroamericana.
El primer suceso tuvo lugar en un centro penal de ese territorio, donde fueron asesinados nueve reos y otros tres resultaron heridos, en un tiroteo entre presuntos miembros de pandillas o maras.
Por otra parte, en el estacionamiento del aeropuerto de San Pedro Sula, un ataque armado causó la muerte de otras seis personas, y tres resultaron heridas.
Un grupo de hombres armados acribillaron a seis personas y dejó heridas a otras tres en el aeropuerto Ramón Villeda Morales (San Pedro Sula) en lo que la Policía considera que se trata una operación planificada que desató el pánico en las instalaciones.
«Tras acribillarlos se dieron a la fuga en los tres vehículos que antes habían usado para cortar el paso a sus víctimas. Fue algo bien planificado», añadió el comisario Juan López.
Los tres heridos fueron trasladados por patrullas de la policía a un centro asistencial de La Lima.
La ola de violencia sin precedentes ha dejado en los 17 meses de administración del presidente Porfirio Lobo más de nueve mil 500 víctimas mortales, indicó un informe del Comisionado Nacional de los Derechos Humanos (Conadeh).