Surcorea y Estados Unidos realizan este sábado maniobras de desembarco militar en la ciudad de Pohang, consideradas por Pyongyang como un ensayo de invasión a la República Popular Democrática de Corea (RPDC).
El simulacro -parte de los ejercicios conjuntos Key Resolve y Foal Eagle- moviliza a 17 mil 200 marineros estadounidenses y surcoreanos, y a un grupo proveniente de Australia y Nueva Zelanda, naciones que forman parte de las 17 incluidas en el Comando de Naciones Unidas.
Datos difundidos por la agencia de noticias Yonhap revelan que el buque USS Bonhomme Richard y el barco de atraque anfibio USS Ashland protagonizan la maniobra Amphibious Operations para simular la destrucción de instalaciones enemigas.
Pyongyang anunció que buscará alternativas a las provocaciones, que persiguen iniciar una guerra, derrocar al gobierno norcoreano y destruir su sistema social.
La víspera, el primer secretario del Partido del Trabajo de la RPDC, Kim Jong Un, participó en un entrenamiento militar con cohetes balísticos con el objetivo de revisar la capacidad de las tropas nacionales en un escenario de guerra.
El líder norcoreano calificó de exitoso el simulacro y reafirmó la correcta preparación de las huestes en caso de un conflicto regional.
Acerca de la reciente prueba de la bomba de hidrógeno, Kim Jong Un indicó que el hecho constituye la etapa más alta del desarrollo de las fuerzas armadas nucleares de la RPDC.
En un comunicado publicado por la agencia norcoreana de noticias KCNA, el gobierno destacó que la prueba de la bomba de hidrógeno responde a la necesidad de defender la soberanía del país y el derecho a la subsistencia ante amenazas de fuerzas extranjeras.
El ensayo deviene medida para defender a la nación de amenazas nucleares de parte de fuerzas hostiles encabezadas por Estados Unidos, y asegurar la paz de la península coreana y la estabilidad regional, añadió la nota oficial.